Benito de la Morena. Apreciado amigo, siempre tan certero y tan profesional, lástima que los que nos gobiernan y esos otros que también nos quieren gobernar, no tengan la claridad de ideas necesaria para saber entender lo que el pueblo demanda y constatar que si se recupera la microeconomía, esa del salario mensual que posibilita hacer la compra diaria, sería un buen acicate para garantizar la continuidad de los mercados.
Hoy en día, y eso lo he aprendido de tus acertados artículos, la economía es global y se coordina desde centros de mando ubicados, muchos de ellos, en paraísos fiscales de todos conocidos y que cuando se les quiere “tocar” suelen incluso pedir ayuda a Bruselas para que se investigue y reduzcan las presiones que pueden poner en riesgo las fortunas de los accionistas que se enriquecen desde las multinacionales que nos suben el precio de la gasolina y de la luz.
La soluciones sencillas siempre han sido las mismas, reducción de sueldos, antiguamente te quitaban el grano y subían impuestos y así nacieron los Robín de los Bosques y los José Mª el Tempranillo, que resultaron ser menos bandoleros que los que nos gobernaban. Luego llegaron los sindicatos aplicando las teorías de Marx y de Engels, que fueron contraatacadas por el “Fordismo” y el Taylorismo” como medidas capitalistas de aumento de producción y nunca se pudieron de acuerdo para que mi padre, obrero de toda la vida, fuera mejor considerado por su jefe de toda la vida.
Ahora que voy siendo mayor, me encuentro que mis ilusiones sindicalistas se han desvanecido porque a los que conozco, y son bastantes, se les ha visto el plumero y viven mejor que los jefes y, con menos estudios y educación, pues a la hora del engaño, mejor que sea un titulado que no un gañán el mentiroso y aprovechado de tu inocencia, lo digo por eso de la dignidad propia, parece que sabe mejor que te engañe un tío listo, que no un pelanas, aunque ambos sean unos hijos de “Gran Bretaña”, con perdón y sin querer ofender a los “llanitos” que ahora están muy sensibles porque el “movimiento” está haciendo que se les pueda ver el “plumero”.
Dicen que hay universidades en las que se forman los futuros “amos” del mundo, supongo que también las habrá en las que formarán los futuros “defensores” de los derechos sociales y me imagino que también que la “calle” pondrá a todos en su sitio cuando el hambre apriete. Ahora no es todavía el momento, me refiero al caso de España, porque la economía sumergida es la pillería tolerada por todos los que deberían vigilarla y el reparto de las pensiones y subsidios un mal menor que da aire al cuerpo de aquellos que están peor. Hoy escuchaba a la dependienta de un supermercado comentar que la habían quitado la paga extra, y al rato comentaba lo bien que había estado de vacaciones en determinado lugar, vamos que se había reajustado, aunque con al extra estaría mejor. Es verdad, a que negarlo, pero ahora toca optimizar, palabreja que significa rentabilizar mejor lo que haces, vamos lo de los ERES y Bárcenas son un ejemplo de optimización, solo que para unos cuantos y no para el colectivo social que paga impuestos.
La ventaja para los defraudadores es que los que gobiernan y los que quieren gobernar son muy tolerantes y solo están pendientes de como les afecta a su prestigio y al del “partido” y siempre dicen las mismas cosas antes que después y eso confunde, por ejemplo, se deshacen sus labios cuando hablan de Bárcenas y no se atreven a condenar los ERES en Andalucía, vamos que eso del “caiga quien caiga”, es cuento chino, y cuando la prima de riesgo estaba en 600 puntos la economía estaba muy mal y manifestaciones continuas en la calle, pero ahora que está en 248 nadie se manifiesta para decir lo contrario.
Todo es un despropósito de intereses contrastados, amparado en la complacencia que da la ignorancia. Yo a veces pienso que es mejor así, por aquello de ¡ojos que no ven…! pero luego me revuelvo y reacciono contra el sistema, como para sentirme de nuevo vivo, y vuelvo a confiar en los políticos, porque horados los hay y lo comprobaremos en cuanto nos libremos de los corruptos, provengan de donde provengan; y retomo la ilusión pensando en que la juventud “formada” nos pondrá en el lugar que nos corresponde a poco que la ayudemos, pues de ella es el futuro que la estamos usurpando; y recuperamos universidades dignas, con catedráticos y profesorado competente que mire mas por el alumnado que por su “ombligo” pues su labor educativa debe ser y no debe olvidarse nunca, “vocacional”; y recuperaremos valores antaño “propiedad” de estamentos que no ha mostrado estar a la altura de las épocas y han dejado perded los conceptos de la ética, la moral, la honradez, la caridad, la templanza, la generosidad….la entrega solidaria que tanta falta hace dar para beneficio de todos, incluido el de uno mismo.
Hay esperanza querido amigo y tus reflexiones me han ayudado a poner al día las mías, y por eso te doy las gracias, porque hoy también me has dado un motivo de soñar con cosas mejores que las que habitualmente nos regalan ciertos medios de comunicación, que parecen tener la consigna de mantener la crispación en estado permanente, para no se qué fines perversos.
Un abrazo y hasta siempre.