De Huelva a Nueva York pasando por Londres y Chicago, así es la vida del joven Álvaro de la Morena

Mari Paz Díaz. Álvaro de la Morena es un onubense que, según nos cuenta, se crió y disfrutó de su infancia y adolescencia de la provincia de Huelva «con los valores y principios de mis padres y abuelos». Acostumbrado a viajar y a salir fuera porque solía pasar el vereno entre Andalucía la Sierra de Gredos (Ávila) donde residían durante la temporada estival sus abuelos paternos, Álvaro siempre ha sido una persona inquieta y curiosa. observadora y atrevida. Todos estas características han provocado que este joven se marchara fuera de Huelva nada más acabar la Selectividad. Su primer destino fue Barcelona para estudiar Diseño Multimedia, donde se percató que su profesión debía ser la Comuncación.

Fue un cambio drástico, pero enriquecedor que le animó a  marcharse a Madrid para terminar la carrera. Una vez finalizado sus estudios, De la Morena salió por primera vez de España. Se fue a Londres con la idea su futuro fuera de España. «Aquella experiencia fue muy significativa para mí, ya me daría la confianza necesaria para lanzarme a la aventura en la hoy día estoy inmerso ahora mismo en Estados Unidos», afirma Álvaro.Hoy, desde Chicago, nos cuenta cómo está siendo su estancia en Estados Unidos, una experiencia que recomienda a todo el mundo.

-¿Por qué decidiste irte fuera?
–Principalmente para buscar una formación complementaria para mi profesión y aprender inglés, aprovechando la época de tránsito e incertidumbre en la que vive nuestro país. Y Estados Unidos es una gran opción para audiovisuales, publicistas y periodistas españoles, ya que aquí existe un gran respeto por la profesión y la actividad está bastante bien remunerada. Además, el conocimiento de la lengua española supone una gran ventaja para trabajar e integrarse en el país.

-¿Cuál era tu nivel de inglés al llegar?
–En España creía que tenía un nivel intermedio, pero cuando llegas aquí y entablas alguna conversación, te das cuenta que tu nivel es bastante básico. La opción de aprender el idioma en un país de lengua inglesa es muy recomendable, pues si te lo propones, en poco tiempo puedes obtener grandes resultados. Aquí puedes usar un lenguaje a veces más culto, otras más coloquial, estar escuchando diferentes acentos en la misma conversación… Es un aprendizaje continuo del idioma.

-¿Cómo está siendo por el momento la experiencia?
–Está siendo apasionante. Estoy conociendo y entablando amistad con personas de muchas culturas. En esta ciudad conviven gente de 60 nacionalidades diferentes y, precisamente, me apetecía huir un poco del etnocentrismo que algunos países tienen estigmatizado en su cultura. Nunca habría pensando, hasta hoy, que estaría en Chicago patinando sobre hielo frente a los edificios más grandes de América del Norte. Que disfrutaría de una cena en el piso número 102 de un rascacielos a 370 metros de altura o que vería de un partido de la NBA en el estadio donde Michael Jordan hizo su leyenda.

-¿Te has marcado algún objetivo o reto?
–Adquirir un nivel avanzado en inglés para comenzar en septiembre un postgrado específico en composición digital de video. Mientras, voy a viajar todo lo que pueda. Hasta ahora he trabajado en cosas muy variadas en estos años para rellenar mi tiempo o mantenerme con algo de dinero: voluntariados, trabajos de verano, asistencia en marketing, producción en cortometraje, serial y documental, prácticas en televisión… De esta manera estoy retrasando el comienzo de una opción laboral más estable, pero confío en acceder a ella un poco más tarde, con la formación adecuada y con más garantías.

-¿Cómo es América?
–Estados Unidos me parece un lugar con muchísimas oportunidades, ideal para el intercambio de conocimientos o si eres una persona con talento. Creo que tenemos muy estereotipada la cultura americana. Mi impresión es la de una sociedad muy diversa, tolerante, competitiva y con una historia realmente interesante. En Chicago, donde resido actualmente, se han rodado multitud de películas famosas. Es tierra de apaches, de Martin Luther King, Al Capone, la música jazz, el blues, héroes del cómic como Batman o del mismo presidente Barack Obama. Históricamente, la ciudad sufrió un gravísimo incendio, siendo reconstruida casi en su totalidad por los mejores arquitectos y dando como resultado una ciudad que es la referencia mundial de la arquitectura moderna. A su vez, esta rodeada por uno de los cinco grandes lagos de América del Norte, el Lago Michigan, alrededor del cual viven 12 millones de personas, con una extensión similar a Croacia.

-¿Qué piensa tu familia de tu aventura?
–Tengo la suerte de contar con unos padres muy abiertos de mente que desde el principio me han apoyado en todo. No tengo hermanos y sé que para ellos siempre es difícil mi marcha. Sin embargo, hablamos frecuentemente mediante videoconferencia y tenemos una relación de estrechísima confianza. Llevo a toda mi familia siempre conmigo, y aunque algunos miembros ya no están presentes, ellos son mis auténticos referentes. Nunca les podré devolver todo lo que me han dado.

-¿Y tus amigos?
–Con mis amigos no existe la barrera de la distancia. Somos un grupo muy unido y que nos conocemos desde hace muchos años. Cada uno tiene su vida pero seguimos sintiendo adoración los unos por los otros. Pude hacer buenas amistades fuera de Huelva también y con todos ellos mantengo el contacto y el cariño en la distancia, en gran medida gracias a las redes sociales. Me considero muy afortunado en este sentido. Mi familia y amigos es gran parte de lo que me hace seguir en pié y con ilusión día tras día para cumplir mis objetivos.

-¿Cuáles son tus planes de futuro?
–Mi plan inmediato es mudarme a Nueva York el próximo mes. Es el lugar donde estudiaré el Máster a partir de septiembre. Durante estos meses tengo planeado hacer un curso en Motion Graphics, sacarme el Toefl con la mayor puntación posible y dedicarme a fondo a encontrar unas prácticas en mi ámbito profesional.

-¿Piensas volver a España?
–Tengo pensada una larga estancia en el extranjero y quiero buscar en este país opciones laborales, pero no me cierro puertas a ninguna opción. El inglés sigue siendo, como todos sabemos y aunque algunos siguen obviando, importantísimo para abrirse al mundo. Más aún si queremos trabajar fuera o conocer nuevos entornos. Creo haber dado ese paso y ahora tengo la sensación de poder acceder a un mercado mucho más amplio que antes.

-¿Qué es lo que más echas de menos de Huelva?
–El clima, sin duda. La semana pasada llegamos a la máxima de menos veinte grados bajo cero. Con una sensación térmica de menos veintinueve. La nieve cubría los coches y hacía un viento terrible. Se me congelaron hasta los pelos, literalmente.

-¿Recomiendas a todo el mundo que viva un tiempo fuera de España? ¿Por qué?
–Por supuesto. La experiencia es algo que no se puede comprar. Esto hay que vivirlo y demostrarte a ti mismo hasta donde eres capaz de llegar. Creo que todo esto es parte de tu leyenda personal, como hablaría Paulo Coelho en su famoso libro El Alquimista. A menudo damos grandes pasos sin darnos cuenta en el momento. Pero un día, cuando realmente lo necesitamos, ahí está. Formamos nuestro criterio y nuestra personalidad a partir de nuestras vivencias y poco a poco van encajando las piezas de este gran Tetris que sería la vida, en sus diferentes niveles. Añorarás tu ciudad, tu familia, tus amigos, en el fondo tu origen… pero compensa.

-Para terminar: un deseo.
–Animar a los que se encuentren indecisos, a encarar este momento con firmeza y optimismo. Debemos amar en cierta manera la incertidumbre para salir fuera y emanciparnos. Algo muy útil es crearse objetivos a corto y medio plazo. Aunque lo más importante, decidamos o no cruzar la frontera, es no tener miedo a crear nuestro propio camino.