Redacción. El Ayuntamiento de Huelva, desde la Concejalía de Urbanismo, Medio Ambiente y Transición Ecológica, ha reforzado la inspección contra las construcciones ilegales en Marismas del Odiel. Tras un primer análisis, con la colaboración de los Servicios Municipales de Infraestructura y Policía Local, se ha procedido al derribo de una edificación que se estaba levantando de manera irregular en la calle Cristo, identificándose infracciones en las calles Carreta, Santa Ana o Virgen de Belén, entre otras, a las que también se les ha abierto expediente y sobre las que se está actuando mediante distintos procedimientos. La intención, según ha apuntado el teniente de alcalde responsable del Área, Manuel Gómez Márquez, “es continuar la vigilancia para evitar la proliferación de incumplimientos de la normativa urbanística en el barrio”.
En este sentido, el concejal ha explicado que se trata de viviendas construidas de modo irregular y fuera de todo ordenamiento, que no cuentan con infraestructuras para los servicios básicos de saneamiento y abastecimiento de agua y electricidad, por lo que no tienen garantizadas las condiciones mínimas de seguridad y salubridad requeridas para su habitabilidad. Pero además, Manuel Gómez advierte que “las construcciones ilegales frenan la transformación sin precedentes en la que está inmerso el barrio, poniendo en riesgo el proyecto del ‘casa por casa’ que tanto esfuerzo ha costado poner en marcha, a las administraciones, pero principalmente a los vecinos que han luchado durante décadas para la revitalización de esta barriada y la mejora de la calidad de vida de sus familias”.
Por ello, continúa el concejal “no vamos a permitir ni un paso atrás, tenemos que impedir que los solares desalojados se ocupen ilegalmente porque no podemos olvidar que el fin último es rehabilitar una zona degradada físicamente, para abordar con ello problemas de carácter social”.
El Ayuntamiento de Huelva, desde el departamento de Disciplina Urbanística tiene la obligación de velar por el cumplimiento de las normas urbanísticas y ello implica garantizar la legalidad de los usos del suelo. Además, “es fundamental frenar la proliferación de incumplimientos de normas para evitar un efecto llamada en la transgresión, porque si no actuamos, el fenómeno irá progresivamente aumentando y la sensación de impunidad se consolidará”. De esta forma, insiste el edil “vamos a hacer un esfuerzo, con inspecciones continuas, agilizando los trámites para la demolición y desaparición de construcciones ilegales porque es también una medida de convivencia social, de mantenimiento de la seguridad pública y de normativa cívica que todos debemos cumplir».