Una ópera flamenca a orillas de la mar de Huelva: ‘Manuela’

J.A.M. Manuela se llama la ópera flamenca que discurre en un mundo tan onubense como la pesca. La historia, las historias de Huelva y la mar tienen una nueva referencia para arrancarlas del olvido, para situarlas en lo que son, perfiles humanos que configuran la identidad de esta tierra, de esta costa. Y, particularmente, las mujeres de la mar, como ‘Manuela‘.

Francisco Cruz Beltrán ha construido una obra inspirado por su afición al flamenco y por la energía inagotable que siempre lo tiene embarcado en algún proyecto, en alguna iniciativa. Conocido sociólogo, que ha sido profesor de la Universidad de Huelva, mucho antes de todo estuvo implicado en el Apostolado del Mar, experiencia que le conectó para siempre con este ámbito de tanta dureza y crudeza social.

De hecho, la realización de su tesis doctoral, ‘Estructura social del sector pesquero andaluz‘, le hizo introducir aún más su análisis en un aspecto de nuestra realidad hasta entonces insuficientemente considerado. Todo ello le permitió conocer historias de vida sobre las que hoy hace un relato musical sustentado en el flamenco.

La ópera flamenca está configurada en tres actos que describen la historia de Manuela desde tres perspectivas temporales y afectivas. Manuela como hija, Manuela como esposa y Manuela como madre. Los tres planos tienen en común las ausencias, las del padre, las del marido y las del hijo. A estos tres actos se añade un apartado final, sustentado en un tanguillo-habanera, titulado ‘Las Mujeres del Mar‘.

Manuela es una mujer de cualquier pueblo costero de Huelva. Una de tantas que han vivido de forma muy distinta a las mujeres de cualquier otro lugar. Y, como nos señala Paco, «Manuela existió y se le ahogó su hijo, pero sólo me inspiró el nombre de la ópera; el resto de las actividades, incluido el drama, es genérico al conjunto de mujeres, madres e hijas de marineros, muchas de las cuales fueron viudas, huérfanas o perdieron a su hijo«.

Según indica Cruz, la ópera está enmarcada en un espacio y un tiempo: la Costa suratlántica andaluza en las décadas 60 – 70 del siglo pasado, en los que se producen grandes cambios en el sector y en la sociedad española en general. «Fueron tiempos de muchos accidentes en el mar y naufragios con muchas víctimas -observa-. Se consiguieron, gracias también a las mujeres, acortar campañas, mejorar las condiciones laborales y de instalaciones de habitabilidad de los barcos, lo que ha permitido que actualmente hayan disminuido sensiblemente los accidentes y naufragios, limitándose casi exclusivamente a fallos humanos. Pero siguen existiendo Manuelas, como las que ha producido hace poco el naufragio del Villa de Pitanxo en Canadá con una víctima de Lepe».

La letras son originales a excepción de un poema de Juan Ramón Jiménez y los fandangos personales de Paco El Caena y Paco Isidro que interpretan ellos mismos. El autor ha adaptado otras dos letras: la siguiriya del Loco Mateo y la Marinera de la barca de Cartaya de Pepe Marchena.

La música procede de los palos del flamenco que se utilizan: romance, nanas, fandangos, bamberas, soleares, zambra, jabegotes, bulerías, siguiriya, farruca, tanguillo, habanera. «Para la parte orquestada doy unas pinceladas -compases- de Falla y Lorca. Sin ser flamenco, ni mucho menos, del conocido músico onubense Emilio Molero adapto tres piezas musicales. Cada pieza está elegida en función del tema que se trata» -añade-.

Le preguntamos por la posibilidad de que sea producida a nivel escénico. Nos comenta que «El producto final va a ser un libro algo innovador, que puede ser objeto de la curiosidad de algún productor del arte escénico, en cuyas manos pondría todo el material que he utilizado para que lo adapte a la representación. De todas formas, el libro llevará una representación en vídeo, a través de códigos QR«.

La idea de llevar a cabo este proyecto le vino a Paco Cruz porque se está cumpliendo el primer centenario del famoso Concurso de Cante Jondo de Granada que promovieron Falla y Lorca, en el que también participó, como convocante, Juan Ramón Jiménez y, como guitarrista oficial, Manuel Gómez, conocido como Manolo de Huelva.

Su afición al flamenco, -apunta- «en el que hice pinitos con la guitarra, en mi juventud, de la mano del patrón de pesca de Cartaya José Pérez Ramblado, y mi relación con el sector pesquero andaluz, que terminó constituyendo la materia de mi tesis doctoral, determinaron finalmente la temática de la ópera, que no es otra que un reconocimiento del papel fundamental de la mujer en este sector».

La ópera flamenca Manuela ha tenido una gran respuesta una vez que se ha ido teniendo conocimiento y ha creado mucha expectación. Cuenta con los siguientes intérpretes, en orden de aparición en la obra:

Orquesta sinfónica colombina
Grupo la Otra Orilla
Juani Ferrera
Paco El Caena
Daniel Ferrera
Cristina Alvarez
Paco Isidro
Palo Dulce