HBN. La evolución tecnológica ha dado pie a que, algunos procedimientos que antaño requerían muchas horas e incluso días, en la actualidad terminen en un parpadeo. Son numerosos los ámbitos que lo demuestran a la perfección. El mejor ejemplo posible es el crediticio. Y es que hay préstamos que se conceden en cuestión de minutos.
¿Cómo es posible que los usuarios puedan obtener este tipo de soluciones financieras en un período de tiempo tan corto? En próximos párrafos analizaremos las claves que dan pie a esta situación, la cual se ha traducido en que aumente la demanda de los mini préstamos online.
Adiós a las garantías que antes sí se exigían
Basta con echar un vistazo a las condiciones de los préstamos de una entidad financiera como Bondora para darse cuenta de que la experiencia a la hora de pedir un mini préstamo muy poco tiene que ver con la de un par de décadas atrás.
No hay que echar la vista tan atrás: hasta hace tan solo un lustro seguía habiendo muchos prestamistas que exigían a los usuarios entregar multitud de documentación con el objetivo de que el crédito fuese aprobado.
Incluso en la actualidad sigue ocurriendo, pero por suerte cada vez más empresas crediticias como Bondora se olvidan de las garantías, evitando exigírselas a sus clientes. Todo lo contrario: han optado por prescindir de los avales.
Aportar un aval para pedir un crédito suponía lidiar con muchos documentos, debiendo comprobarlos uno a uno. Esta demora no se produce en la actualidad. El hecho de que los créditos exijan muchas menos garantías de devolución deriva en que se concedan en una cantidad de tiempo notablemente inferior.
Este aspecto es agradecido enormemente por aquellas personas que han de afrontar un pago con urgencia. Ponte en situación: tu coche sufre una avería que no entra en garantía. El problema te impide desplazarte, pero has de hacerlo para ir al trabajo.
La adversidad surgida es de cierta gravedad, por ejemplo obligándote a remplazar el embrague. Sin embargo, no dispones del dinero necesario para pagarle al taller la correspondiente factura con tal de que den comienzo a las labores de reparación. Es entonces cuando agradeces enormemente la rapidez con la que se conceden hoy en día los mini préstamos.
Pero, ¿Qué pasaría si la compañía en cuestión te obligase a presentar un aval y otras garantías? El simple hecho de tener que comprobar toda la información aportada por ti retrasaría enormemente el procedimiento.
Por supuesto, al hecho de no precisar garantías de ninguna clase para conceder los mini préstamos se suman otros aspectos que también conllevan una rapidez que antaño era del todo impensable.
Profesionales que trabajan todos los días del año
Otro factor guarda relación con el equipo que está detrás de prestamistas como Bondora. Precisamente esta plataforma ha adquirido una gran popularidad por ser de las más rápidas en la concesión de los mini préstamos.
Los expertos que forman parte de su equipo se caracterizan por tener una dilatada trayectoria a sus espaldas. La experiencia acumulada en el ámbito financiero les permite operar con una gran profesionalidad, sea cual sea el momento del día en el que tramiten las solicitudes que reciben.
Estos especialistas son conscientes de que un préstamo puede requerirse en cualquier instante. No tiene por qué tratarse de un día laboral y del típico horario de oficina. Todo lo contrario: en ocasiones las adversidades surgen un festivo y en plena noche. Sea cual sea el caso, la disponibilidad de esta clase de entidades prestamistas es plena.
Por ejemplo, si se pide un mini préstamo un sábado, no hay que esperar al lunes para obtener alguna respuesta. Unos minutos después ya se sabe si el crédito ha sido o no concedido, aunque el porcentaje de aprobación es muy elevado. Así pues, es probable que incluso antes de dar comienzo a la siguiente semana ya dispongas del dinero en tu cuenta.
Experiencia
Finalmente no puede pasarse por alto otro aspecto: la experiencia que han ido acumulando a lo largo de los años las compañías financieras que ofrecen soluciones como los mini préstamos. El mejor ejemplo posible es el de Bondora.
Y es que estamos ante un prestamista que acumula un total que supera el millón de clientes. La dilatada trayectoria que tiene a sus espaldas permite a los profesionales operar con una gran celeridad, concediendo los préstamos en menos tiempo del esperado y haciendo la transferencia del dinero cuanto antes para que la inyección de liquidez se produzca de forma inmediata.
Esta rapidez es vista con muy buenos ojos por los usuarios, especialmente los que tienen algún tipo de urgencia económica. Los imprevistos de tipo monetario son bastante habituales, así que no sorprende que los mini préstamos estén a la orden del día, previendo los expertos que las solicitudes seguirán aumentando en los próximos años.
