G. D. Un empate tan bueno como doloroso. Ese es el botín conquistado por el Recreativo de Huelva en su visita a Melilla (1-1), en un partido que fue un carrusel de emociones, que tuvo su punto más álgido con el gol de Caye Quintana a cinco minutos del final, y su más bajo con el empate ya en el tiempo añadido de Moha. Como dijo aquel, “el fútbol es así”.
Vaya por delante que entre las dos opciones esta crónica se moverá por la máxima de la botella medio llena. La que te dice que el Recre suma ya 16 jornadas sin perder, que empató en el campo del líder, que expuso en el Álvarez Claro cosas muy buenas, y aquellas que no lo fueron son supuestamente mejorables.
Aunque el impacto de haber perdido dos puntos de oro -porque lo eran- en el último suspiro puede llevar al desencanto, justo es decir que antes del gol de Caye Quintana -minuto 85-, todos los recreativistas hubieran firmado sin duda el empate, que era el marcador que campeaba entonces en el marcador. Lo que vino a continuación ni puede ni debe alterar el análisis de lo que fue en realidad del choque: partido equilibrado y justo empate.
Hasta llegar a esa locura final pasaron cosas. Empezando por el principio, reseñar que un solo cambio con respecto al once del partido anterior introdujo José María Salmerón. Fue el regreso -esperado- de Tropi, que entró por Pablo Andrade, por lo que el Decano volvió a jugar con tres centrales y dos carrileros largos, en este caso Pina e Iago Díaz.
Un aviso nada más comenzar de Caye Quintana, y un remate de cabeza de Ródenas al filo del descanso. Fueron los argumentos ofensivos del Recre en la primera parte en Melilla, donde tiró de orden, de seguridad y de firmeza defensiva, para contener a un equipo que no se ha encaramado en el liderato por casualidad, y que llevó la iniciativa en ese periodo.
Puede que tener el viento a favor fuera una de las causas por las que el dominio del partido correspondiera al Melilla. Pero tampoco abrumó. Se adueñó del juego, en un partido equilibrado, y se asomó más que su oponente por la portería rival. Pero tampoco el Recre pasó por apuros.
Aunque en la jugada inicial Caye Quintana probó fortuna con una acción individual, que acabó fuera del portal de Dani Barrio, la realidad del primer tiempo, por lo menos hasta cumplida la media hora fue el Melilla apretó algo más. Así Marc Martínez tuvo que intervenir en varias ocasiones, en remates de Óscar García, Héber Pena y Ruano.
Pasada la primera media hora el Recre dio la impresión de sacudirse ese dominio local, y de nuevo apareció por el marco local con un disparo lejano de Jesús Valentín y, sobre todo, con un cabezazo de Ródenas que obligó a Dani Barrio a intervenir.
No dio mucho más de sí el partido en ese primer tiempo, que posiblemente se jugara más como quiso el Recre, relativamente cómodo en el terreno de juego a pesar de ese factor importante de tener el viento en contra.
La historia del segundo tiempo fue parecida. Si acaso que conforme pasaron los minutos el dominio del Melilla pudo subir un peldaño y convertirse en agobio. Pero para eso está Marc Martínez.
Ya de entrada en la continuación se vio un cuadro de casa más incisivo, de ahí que Salmerón comenzar a modificar cosas. Alberto Quiles y Marc Caballé entraron por Borja Díaz y Alberto Ródenas, con idea de dar oxígeno a un equipo que, seguro, lo iba a necesitar. Y más en los minutos en los que apretó de lo lindo del Melilla, escenificado en un disparo de Ruano respondido como merecía la ocasión con un paradón de Marc Martínez.
A diez minutos del final Pablo Andrade entró por Fernando Llorente, todo con 0-0 y un mundo por decidir. Y bien que se pudo decidir poco después con el gol de Caye Quintana. Nació en una buena jugada del Recre, con remate de Alberto Quiles y que tuvo respuesta con un paradón de Dani Barrio; la pelota volvió a pies del Recre y Marc Caballé centró para que, ahora sí de manera inapelable, el goleador del Decano hiciera de las suyas. Un partido que se hubiera firmado con empate caía del lado del Recre.
Lo que vino a continuación no es la primer que ha pasado en el fútbol, y seguirá pasando. El Recre se atrinchera para mantener la renta, y el rival a la heróica busca la pedrea del empate. Los minutos no pasan para el que va ganando y sí para el que pierde… hasta que todo acaba, bien con el mismo marcador, bien con el empate. Esta vez tocó empate. Moha, de cabeza, tras el saque de una falta, fue el encargado de hacer esas tablas que en ese momento saben a demonios al Recre, pero que con el paso del tiempo se valorará en su justa medida. Esto sigue…
MELILLA: Dani Barrio; Pepe Romero, Sofian Chakla, Richi, Jilmar; Alfonso; Otegui, Menudo, Ruano, Héber Pena (Traoré, 65′); Óscar García (Brian, 85′).
RECREATIVO: Marc Martínez; Israel Puerto, Iván González, Jesús Valentín; Pina, Iago Díaz; Borja Díaz (Marc Caballé, 60′), Tropi, Fernando Llorente (Pablo Andrade, 79′), Ródenas (Alberto Quiles, 60′); Caye Quintana
Árbitro: Iosu Galech Apezteguía (colegio navarro). Mostró la cartulina amarilla a Borja Díaz (40′), Israel Puerto (44′), Jesús Valentín (74′) y Alberto Quiles (87′), por el Recre.
Goles: 0-1 (85′) Caye Quintana remata de cabeza un centro desde la izquierda. 1-1 (94′) Moha, de cabeza tras el saque de una falta.
Incidencias: Partido correspondiente a la 32ª jornada en el grupo IV de Segunda B disputado en el estadio Álvarez Claro.