Redacción. Elementos tallados en madera de acebuche, brezo y madroño como cucharas, badajos o tablillas para la mochila, acaban convirtiéndose en obras de arte gracias a Francisco Romero, quien sigue fabricando y reproduciendo, manteniendo los detalles de cada pieza, las diferentes tallas de los cabreros.
Los hay desde un diseño más simple, donde prima la funcionalidad, a otros donde los útiles son profusamente tallados con todo tipo de adornos o detalles.
Este denominado arte pastoril, viene a considerarse una artesanía; antiguamente los elaboraban los pastores en sus ratos de ocio, en la soledad del campo mientras vigilaban el ganado.