J.A.M. La continuidad en la solera del Bellavista Huelva Club de Golf está asegurada. Muy por abajo llegan pisando con convicción la yerba del Bellavista nuevas generaciones, pequeños golfistas. A su natural deseo infantil de jugar se suma la ilusión de aprender y progresar en un bello deporte en el que, como todos los más populares de origen británico, esta provincia tiene mucho que contar. Y este pasado domingo se ha puesto de manifiesto con un ‘campeonato’, su primer campeonato para los más pequeños golfistas.
La importancia de esta fructífera dinámica la tiene claro la dirección de la entidad en la persona de su gerente, José Antonio Téllez Sánchez, la tiene claro su entusiasta profesor David Blanco Tilbes, y la tienen claro jugadores veteranos que son el alma del club, como Cristóbal Guerrero López.
Por ello este domingo han ocupado su atención y energía en organizar un ‘campeonato’, el primero, de la Escuela Infantil de Golf de la centenaria entidad. Más de treinta niños, pequeños golfistas, han disfrutado de una magnífica jornada en Bellavista.
Lo importante ha sido, sin ninguna duda, participar, pero también ha servido para sorprender a los espectadores ‘mayores’ con golpes y estilos impropios de tan tempranas edades.
De esta forma han disfrutado así mismo los padres, viendo a los pequeños divertirse motivados por David. De camino han comprobado el ‘desparpajo’ deportivo de los diminutos golfistas, que muestran el mayor deseo por continuar esta estimulante experiencia de convivencia y aprendizaje.
La prueba ha tenido tres niveles. El correspondiente a los más pequeños que empiezan suponía una prueba de tres hoyos. Los un poco mayores de cuatro y una tercera con una tarjeta de cinco hoyos. En cuatro hoyos obtuvieron los mejores resultados Sebastián y Pedro, y en cinco Carlos y Teresa. Todos los participantes tuvieron su merecida medalla excepto estos citados, que se llevaron un trofeo para las vitrinas de sus respectivos domicilios.
Los trofeos y medallas han sido patrocinados por la firma Óptica Santa Otilia.