Redacción. Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), con base en Moguer, y pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, han procedido a la detención de un menor de edad, como presunto autor de un delito de incendio forestal en grado de tentativa.
La investigación que ha conducido a la detención de este individuo se inició el pasado día 15 de agosto, después de que los agentes del Seprona fueran requeridos para acudir a la conocida como ‘Zona Cuatro’ ubicada a escasos metros de la urbanización Valdemorales de Mazagón. Allí se había producido un intento de incendio que quedó inmediatamente sofocado pero que pudo haberse convertido en uno de importantes proporciones por la masa boscosa que existe cerca de un área de viviendas.
Cuando los agentes de la Guardia Civil realizaron la inspección ocular, descubrieron la existencia de un mecanismo casero formado por una tabla de madera amarrada a una cuerda envuelta sobre una de las ramas de un pino, donde existía prendido un artilugio que hacía las veces de mecha retardante.
Ante la evidencia de la intencionalidad pirómana de la persona o personas que estuvieran detrás de este intento de provocar un incendio, los agentes decidieron realizar una vigilancia sobre el mismo lugar, ocultándose en la maleza cercana. Esto lo estuvieron realizando durante toda la mañana del día 16, observando como a primeras horas de la tarde de ese día, se aproximaba un individuo quien se tumbó cerca de la base de un pino y se puso a acumular ramas y hojas secas. Cuando ya tenía un montó suficiente para que sirviera de combustible, sacó un mechero y empezó a prender fuego a las hojas acumuladas, momento en que los agentes procedieron a su detención.
La Guardia Civil ha instruido las correspondientes diligencias que, en unión del detenido, han sido puestas a disposición del Juzgado de Menores de Huelva.
1 comentario en «Detenido un pirómano cuando se disponía a prender fuego en un pinar de Mazagón»
Por mucho calor que haga, los incendios rara vez vienen solos porque sí. ¿Acaso no deberíamos saber todos los onubenses los nombres de personajes como éste? Con esta cultura y esta gentuza, onubenses de pro, seguro, para muchas otras cosas (de boquilla), las desgracias están servidas. No creo que hubiera ningún problema ético al publicar su nombre, pues al ser un caso de intencionalidad tan clara, no hay mejor prevención de incendio en una sociedad que la propia presión de unos ciudadanos a otros para exigirnos ser gente de bien.