Antonio Delgado Pinto. Cuatro hoteles de cuatro épocas. Esta nueva serie de textos y fotografías pone el acento en algunos aspectos y detalles de la arquitectura de nuestra ciudad y de nuestra provincia, utilizando el color y la perspectiva para poner de manifiesto la riqueza de un patrimonio que a veces nos puede pasar desapercibido. Esta semana vamos a hacer un repaso por cuatro hoteles de cuatro épocas diferentes de la historia de Huelva.
Yo tuve la suerte de conocer el hotel Granada, aquel edificio diseñado a medio camino entre lo neomudéjar, lo nazarí y lo neorrenacentista, que se levantó no muy lejos de La Placeta y que fue derribado sin demasiados remordimientos. Esta semana traemos cuatro hoteles de cuatro épocas de nuestra ciudad y que afortunadamente siguen en pie: el hotel Colón, a finales del siglo XIX; el Victoria, en plena posguerra; el hotel Luz, en los años sesenta; y el Monte Conquero, a finales del siglo pasado. Como digo, todos siguen en pie: dos siguen funcionando como hoteles, aunque con un nuevo nombre; uno lleva años vacío y sumido en el olvido; y otro ha sido felizmente restaurado y rehabilitado como lugar de exposiciones, conciertos, encuentros y actividades culturales: la actual Casa Colón.
HOTEL COLÓN
Promovido por Sundheim, Mathesson y Doesch, diseñado por el arquitecto José Pérez Santamaría y decorado interiormente por Matarredona y Cuesta a principios de la década de 1880, el hotel Colón surgió como consecuencia de la época de esplendor minero del último tercio del siglo XIX.
Rodeado por una enorme muralla de piedra, fue durante tres cuartos de siglo una isla británica, dentro de la ciudad de Huelva, donde había agua corriente caliente y fría, chocolate, té, prensa inglesa, … cuando el resto del país seguía pendiente de las cartillas de racionamiento.
Los propios ingleses demolieron el pabellón norte, situado en lo que hoy es el Palacio de Congresos y que sin duda era el más hermoso del conjunto arquitectónico, antes de entregarlo al Ayuntamiento a principios de los años ochenta del siglo pasado.
HOTEL VICTORIA
Hace unos años, el investigador Antonio José Martínez Navarro realizó un pormenorizado estudio de este hotel en las páginas de este mismo periódico. Al igual que el cercano hotel Granada era donde se hospedaban los toreros que llegaban a nuestra ciudad, el Victoria era el establecimiento hotelero que acogía a artistas, futbolistas, políticos o actores de cine: aquí pernoctaron los protagonistas principales de ‘El hombre que nunca existió’, película de 1956, sobre el episodio del mayor William Martin, y también este fue el lugar elegido para rodar algunos interiores de la película de 1961 ‘Pachín almirante’.
HOTEL LUZ
El derribo del legendario Velódromo, cuna del Decano, a principios de los años sesenta dejó espacio para conectar la Alameda Sundheim con la avenida de la Escultora Miss Whitney. Es justamente en ese lugar donde los arquitectos Muñoz Salvador y Muñoz Monsalve levantaron este hotel.
Inaugurado el día doce de diciembre de 1968, lo más llamativo de su fachada son sus balcones semicilíndricos y el bajorrelieve que recorre la marquesina de la planta baja, realizado en hierro forjado por José Espinós, que es además una de las primeras imágenes que recuerdo de los viajes a Huelva durante mi infancia y adolescencia.
HOTEL MONTE CONQUERO
El nuevo trazado de la entrada a Huelva por el noreste conforma sin duda una de las más amplias y espectaculares avenidas de entrada a una ciudad. Conllevó el derribo de uno de los barrios señeros de la Huelva del siglo pasado. La barriada de San Sebastián que muchos conocimos quedó reducida a la ermita de la Soledad y poco más. Todo en ella es nuevo ahora, la avenida de Pablo Rada, donde se levantó este hotel a principios de los años noventa, y la avenida de Andalucía sustituyeron a la calle Nueva y Garci Díaz y a la prolongación de la calle San Sebastián.
Anterior número de la Huelva recién descubierta.