Redacción. La Unidad de Dermatología del Hospital Infanta Elena ha analizado durante el pasado año 914 peticiones de estudio de lesiones en la piel procedentes de los centros de salud adscritos a su área, gracias al programa de Teledermatología que viene desarrollando durante los últimos años en colaboración con los Distritos Sanitarios Condado-Campiña y Huelva-Costa y que permite comunicar de forma segura al médico de Atención Primaria con el especialista en Dermatología que trabaja en el centro hospitalario, agilizando enormemente la asistencia y favoreciendo la detección precoz de lesiones cancerosas en la piel.
El objetivo no es otro que acortar los tiempos de espera del paciente, así como mejorar el diagnóstico y el tratamiento de las distintas lesiones cancerosas de la piel de la forma más precoz posible, evitando desplazamientos y facilitando la asistencia, sobre todo a los colectivos más vulnerables. Una iniciativa que ha permitido durante todo el año pasado atender cerca de un millar de consultas en un plazo medio de apenas 4 días desde la recepción de la imagen, dando lugar a la detección de 108 lesiones cancerosas, de las que 99 fueron carcinomas basocelulares o espinocelulares y 9 resultaron ser melanomas.
Esta herramienta de telemedicina se encuentra ya en pleno funcionamiento en toda el área de adscripción del Hospital Infanta Elena que aglutina una población de 175.000 personas de la provincia y posibilita que los usuarios con lesiones en la piel que residen en núcleos de población alejados de los hospitales puedan recibir directamente el diagnóstico previo del especialista de la Unidad de Dermatología del hospital sin tener que desplazarse hasta él, solo acudiendo al centro de salud más cercano.
Gracias a este proyecto, cuando el médico de familia o pediatra sospecha de la presencia de alguna anomalía en la piel, se toma una imagen que es enviada de forma telemática al hospital de referencia para que sea revisada por los facultativos especialistas. Así, en caso de que exista la posibilidad de tratarse de un cáncer de piel, desde la Unidad de Dermatología se incorpora directamente al paciente en la lista de espera quirúrgica para su rápida intervención, sin necesidad de consulta previa, disminuyendo sensiblemente el periodo desde que el usuario acude por primera vez al médico de familia por una sospecha hasta que es finalmente intervenido.
En este sentido, se han intervenido de forma precoz durante el pasado año 205 pacientes en los quirófanos del Infanta Elena por lesiones dermatológicas diagnosticadas dentro de este programa, agilizando así la atención sanitaria y favoreciendo su recuperación. En caso de que el especialista no tenga claro el diagnóstico, se le citará directamente en consulta para descartar la sospecha, como ha ocurrido durante el 2019 en 414 ocasiones.
Es importante destacar la interacción y la comunicación de los médicos de familia con los dermatólogos, que ayuda a mejorar la capacidad diagnóstica y atención a las lesiones dermatológicas en los centros de atención primaria. Con ello se eliminan consultas innecesarias de pacientes con lesiones irrelevantes, al mismo tiempo que se agiliza la identificación y tratamiento de problemas importantes.
Entre los diagnósticos más frecuentes dentro del programa destacan las queratosis seborreicas, que tienen un carácter benigno, las queratosis actínicas, los carcinomas basocelulares y espinocelulares, considerados tumoraciones malignas, pero de pronóstico más positivo si se tratan a tiempo, los nevus melanocíticos y los lentigos solares, que también tienen un componente benigno.
Para hacer posible la implantación de este programa, los centros de atención primaria, cuentan con una cámara con dermatoscopio, un microscopio de epiluminiscencia que incrementa la capacidad de resolución de las imágenes, así como de los equipos informáticos necesarios y se encuentra conectada con la base de datos de usuarios de la sanidad pública andaluza e integrada con la historia clínica digital del ciudadano.
Esta prestación utiliza una aplicación web, accesible y rápida dentro de la red corporativa del SAS, que comunica de forma segura al médico desde su consulta en el centro de salud con el especialista que trabaja en el hospital, de forma que se agiliza enormemente la asistencia, favoreciendo la detección precoz de lesiones cancerosas en la piel y, por tanto, aumentando la posibilidad de un buen pronóstico para el paciente.