Un historiador de la UHU nos desvela los proyectos que consiguieron gestar los primeros parlamentarios onubenses presentes en las Cortes de Cádiz

Elisabeth Méndez. El profesor del Departamento de Historia II y Geografía de la Universidad de Huelva, Víctor Manuel Núñez García, es autor de un importante número de trabajos de investigación, labor que le ha llevado incluso a recibir un premio por su tesis ‘Los inicios del régimen liberal en Huelva. Élites parlamentarias, grupos de poder, elecciones y participación política (1834-1868)’, a través de la cual nos da a conocer, por ejemplo, quienes fueron los primeros parlamentarios onubenses que representaron a Huelva en las Cortes y que logros consiguieron estos para nuestra ciudad, acercándonos de este modo al contexto político que se respiraba en nuestra tierra a mediados del siglo XIX.

En este sentido, en uno de sus libros, ‘Huelva en las Cortes: élites y poder político durante la Década Moderada (1843-1854)’, nos habla de la gran variedad compositiva en las cortes de la época, contando con un grupo mayoritario progresista formado por onubenses, cuya aportación a la ciudad desde Madrid fue la solicitud, en 1843, de la concesión de la aduana en la 2ª categoría para el Puerto de Huelva, en una época previa al desarrollo del puerto con las compañías mineras. Además de este gran logro, estos parlamentarios onubenses consiguieron gestar la carretera provincial con Badajoz.

Se trata, según nos explica este historiador, del “germen de las primeras experiencias electorales en Huelva”, a través de la cual analiza el origen de la praxis política, dando a conocer los nombres de los primeros diputados y senadores que representaron a Huelva en las Cámaras entre 1834 y 1868. El retrato político de estos pioneros los da a conocer a través de los dos tomos de su ‘Diccionario biográfico de los parlamentarios de Andalucía‘.

“En este diccionario hablo de las 52 personas que representaron a Huelva, haciendo además un importante análisis sociológico con características grupales, obteniendo datos curiosos de ellos, analizando, por una parte, su riqueza patrimonial, por otra su formación universitaria, y por último, sus aportaciones en la Cámara de Madrid”.

A este respecto, este investigador nos explica que muchos de estos políticos vivían en Huelva, y las malas conexiones de la época les impedía viajar mucho a Madrid, de ahí que la presencia de algunos solo estuviese recogida en ocasiones especiales. Respecto al perfil personal, “eran personas adineradas y con formación académica”, según nos cuenta este historiador, añadiendo a este respecto que “el cargo de Senador era un cargo vitalicio, concedido por Isabel II, una especie de condecoración a la que no todo el mundo podía acceder, de ahí que los senadores onubenses de la época fueran personas importantes”.

Pero a pesar de tener poca presencia en las Cámaras, estos onubenses fueron quienes consiguieron que se construyeran las primeras líneas férreas para el comercio de minas a mediados del siglo XIX, además de la concesión de aduana de segunda categoría para el Puerto de Huelva, como antes se ha comentado.

Respecto al ambiente político que se respiraba en la capital onubense, que hasta 1834 no se constituyó como tal, perteneciendo hasta ese entonces al denominado Reino de Sevilla, Núñez García comenta que en esa primera mitad del siglo XIX “todavía no se hacía campaña política en Huelva. Además, era un sistema censitario, que dependía de la economía, pues solo votaban los más capacitados económicamente. Esto daba como resultado una participación muy baja, de un 0,5 y un 1,5 por ciento”.

Además de su gran labor investigadora, este onubense conversa con Huelva Buenas Noticias sobre la impresión que le merece la situación actual , en la que cada vez se infravalora más la historia y las humanidades en general, sobre todo desde el ámbito educativo. “La opinión general de la sociedad es que no vas a conseguir trabajo a partir de esto”, algo con lo que este historiador dice no estar de acurdo, ya que “cada vez existe más demanda de productos de historia, como las novelas históricas o series televisivas, como es el caso, por ejemplo, de ‘Isabel‘ o ‘Gran Hotel‘, basadas en una época pasada, y que están teniendo un éxito tremendo en la actualidad”.

Para Núñez García, la historia sirve de “paraguas” para justificar las cuestiones políticas del presente. “Lo que se puede observar, por ejemplo, en el hecho de que los políticos cada vez que pueden basan sus discursos en la historia. El problema es que muchas personas no quieren reconocer la verdadera importancia que esta ciencia tiene”.

En este sentido, este historiador nos habla del importante papel que hoy día desempeña la Universidad de Huelva para luchar contra esa perdida de valor, incentivando el interés histórico “a través de actividades culturales como el Ciclo de Cine e Historia o el Ciclo de Jóvenes Historiadores del Ayuntamiento de Huelva”. A lo que además hay que añadir la participación de estos historiadores en revistas de divulgación, “publicaciones especializadas con cierta difusión, como por ejemplo ‘Andalucía en la Historia‘, en la que participamos casi todos los investigadores andaluces haciendo un esfuerzo por hacer la historia más amena”.