Alberto Plata. Se cumplen ya casi 9 meses del incendio que arrasó unas 10000 hectáreas del entorno de Doñana. A pesar de que las lluvias han tardado en llegar, la fauna y flora de nuestro Parque Nacional se resiste a desaparecer y comienza a rebrotar y colonizar de nuevo este hábitat.
En cuanto a la fauna que hemos podido comprobar que ha vuelto a estos terrenos calcinados, podemos citar al Jabalí (Sus scrofa), Ciervo (Cervus elaphus), Tejón (Meles meles) o Zorro (Vulpes vulpes), entre otros.
También hemos comprobado la presencia de bastantes madrigueras activas de Conejo de monte (Oryctolagus cuniculus), que tantos problemas tiene en el Espacio Natural de Doñana.
Esta presencia abundante de conejos nos hizo tener expectativas de encontrar algún rastro del felino más amenazado del planeta. Dicho y hecho. No muy lejos encontramos alguna huella reciente y varios excrementos de Lince ibérico (Lynx pardinus).
Se constata así la dependencia del gran depredador de Doñana a su presa favorita y que, poco a poco, el terreno afectado por ese terrible incendio del pasado año comienza a recuperarse. Pasarán muchos años para que el ecosistema dañado vuelva a ser lo que fue. Las actuaciones deberán ir encaminadas a recuperar e, incluso, a mejorar este hábitat tan importante para especies emblemáticas de la fauna ibérica.