Redacción. Si algo caracteriza al Festival Luna de Verano es la calidad de sus propuestas teatrales, y fueron testigo de ello las 392 personas que llenaron el antiguo Castillo de Moguer para disfrutar de la espectacular puesta en escena y de la soberbia interpretación que realizó la compañía Teatro Clásico de Sevilla de la universal obra de ‘Hamlet’.
El gran maestro de la escena Alfonso Zurro dirige esta brillante adaptación de la obra de Shakespeare, que terminó con el público en pie ovacionando a un electo de actores y actrices que rozaron la excelencia.
La Fundación de Cultura ha vuelto a apostar con fuerza por un festival en el que tengan cabida espectáculos y propuestas artísticas de primer nivel, y por ello, ha elegido para su puesta de largo a la mejor compañía de teatro de Andalucía y a una de las mejores del país, como es Teatro Clásico de Sevilla, una formación que demostró ayer en la milenario fortaleza de nuestra localidad, la calidad de su elenco artístico, la frescura y originalidad de sus montajes y la brillantez y profesionalidad de todos sus integrantes.
En este sentido merece una mención especial la interpretación del joven Pablo Gómez-Pando, que consiguió meterse en el personaje de Hamlet de una manera realista y natural, con una gama de registros que no escaparon a la atenta mirada del espectador. Junto a él dieron vida a esa trepidante historia Juan Montilla, Amparo Marín, Manuel Monteagudo, Rebeca Torres, Antonio Campos, José Luis Verguizas, José Luis Bustillo y Manuel Rodríguez.
Otro de los platos fuertes del montaje con el que se inauguró anoche el Festival Luna de Verano es la escenografía, con ocho grandes espejos que reflejaban las imágenes de los personajes y la singular transformación que iba sufriendo el suelo a medida que se iba desarrollando la trama. Todo un espectáculo que engrandece más si cabe esta obra de William Shakespeare, con la que Moguer se suma a la conmemoración del 400 aniversario de la muerte del escritor inglés.
Exposición de María José Cumbreras. Con una sobrecogedora exposición que nos descubre la genialidad de la artista Mª José Cumbreras, se inauguró en la tarde de ayer el Festival Luna de Verano con el que Moguer abre sus brazos al teatro, la danza, la música y a otras muchas manifestaciones artísticas.
La luna de Moguer volverá a lucir con un magnetismo especial en las noches de verano, gracias a la programación diseñada por la Fundación Municipal de Cultura, que ha querido abrir el telón de esta nueva edición con una espectacular exposición de pintura que sorprende por su temática, por el dominio de la técnica y por la elección del colorido, pero sobre todo por la arrolladora personalidad de la artista rocianera Mª José Cumbreras, que nos deja en esta colección parte de su vida representada en trazos.
El alcalde Gustavo Cuéllar fue el encargado de inaugurar la muestra junto a la concejala de Cultura Lourdes Garrido y a la propia creadora, que ha llegado directamente a nuestra localidad desde Marrakech, ciudad en la que reside, para abrirnos las puertas de su universo creativo.
Bajo el título de ‘Tiempo y memoria’ nace este trabajo autobiográfico que nos sumerge en las vivencias de esta genial onubense, que utiliza una paleta de tonos ocres para enmarcar precisamente esa vuelta a los recuerdos de su niñez, reproduciendo estas fotografías antiguas que pierden tonalidad por el paso del tiempo.
Si al ver la exposición nadie puede quedar indiferente, sobrecogidos por la espectacularidad de lo que se nos muestra, el mérito es mucho mayor si se tiene en cuenta que Mª José Cumbreras no ha recibido clases, es una pintora autodidacta, todo lo que crea le sale directamente de alma.
Esta impresionante colección se ha distribuido en dos salas, en el vestíbulo del teatro Felipe Godínez y en la casa museo Zenobia-Juan Ramón Jiménez, donde podremos recorrer hasta el 31 de agosto esta gran exposición, de obligada visita, para quienes deseen descubrir el arte con mayúsculas que impregna la obra de Mª José Cumbreras.