Ana Rodríguez. Una historia sobre el Gribaltar de los años 70 es la propuesta teatral que llega este 1 de julio al Gran Teatro de Huelva. Su protagonista es Elisa Matilla, la conocida actriz madrileña de raíces andaluzas que en esta ocasión da vida a Lola, una prostituta que entiende el oficio no como únicamente sexo, sino como el amor que perdió y que sigue buscando, al igual que sus clientes.
‘Gibraltareña’ es el título de esta pieza teatral, dirigida por Juan Luis Iborra, en la que se retrata la realidad del Peñón hace 40 años, época en la que muchas familias vivían separadas por una verja.
Con motivo de su actuación en Huelva, hemos hablado con Elisa Matilla, una de las profesionales de la escena y la televisión más conocida de nuestro país. La actriz, formada en la Escuela de Arte Dramático de Sevilla, ha estado muy presente en los últimos años en los hogares españoles gracias a su papel en la exitosa serie de Telecinco ‘Tierra de lobos’.
Pero Matilla lleva muchos años dedicada al mundo del espectáculo, participando en títulos tan taquilleros de nuestro cine como ‘El maestro de esgrima’, ‘¿Por qué lo llaman amor cuando quieren decir sexo?’, ‘Cha-cha-chá’, o ‘Km. 0’. También la hemos visto en diversas series, como ‘Todos los hombres sois iguales’, ‘7 vidas’, ‘Aquí no hay quien viva’ y ‘En buena compañía’.
Sin embargo, a Huelva llega con una obra teatral, ‘Gibraltareña’, de la que nos cuenta algunos detalles:
– Elisa, llega a Huelva con ‘Gibraltareña’. Hábleme un poco de esta obra.
– Es un monologo tragicómico, con momentos de risa y otros de pellizquitos. Es una historia en clave de comedia donde se cuenta la vida de Lola, una prostituta de Gibraltar, durante los años 60 y 70, lo cual te pone en situación de lo que fueron aquellos años, en los que se cerró la verja dejando parte de una misma familia a cada lado. La obra está llena de situaciones divertidas, porque Lola tiene una manera de tomarse la vida con mucho azúcar, con mucha dulzura. El humor es bastante negro, muy ácido. Quizá es lo que a Juan Luis Iborra y a mí más nos ha sorprendido de todo, cómo la gente se ríe con ese humor negro.
– ¿Cómo ha preparado el papel de Lola?
– Los monólogos son más difíciles porque no existen las referencias exteriores, no tienes un compañero que te dé texto, y encima es un monologo a público, al que hablo directamente. Esto ha sido quizá lo más complicado, trabajar sin cuarta pared y hacia la reacción del público, y además con un texto en el que se pasa de la comedia al drama y del drama a la comedia con mucha facilidad. Pero con las funciones que llevo puedo decir que lo estoy disfrutando, me lo paso muy bien. A veces no tengo conciencia del tiempo que llevo en el escenario porque estoy tan a gusto que no me entero. También, el que Lola sea una mujer andaluza, para mí ha sido la gran facilidad. Me he criado con ellas, las he visto siempre y tengo muchos referentes en mi familia en los que fijarme. Tenía ganas de hacer un personaje tan terrenal. En cierto sitios de Andalucía creo que va a ser un personaje más reconocible, porque Lola tiene una manera de contar la historia muy de aquí, con mucha sorna. El personaje es un regalo que me ha hecho Juan Luis Iborra. Además de Lola saco la manera de ver la vida: para ella no es lo que te pasa sino como te lo tomas… es una filosofía maravillosa.
– ¿Cómo fue el estreno en Valladolid?
– Tanto en Valladolid como en Málaga, por donde también hemos pasado ya, ha ido todo muy bien. Ya son dos veces que me emociono, porque la gente entra a la historia de manera muy generosa y me da la oportunidad de ver lo que les estoy transmitiendo. La gente se ríe con el humor negro, incluso antes de que pase algo, ya cuando lo apunto empiezan a reír y eso es porque entienden el código de la obra desde el principio.
– ¿Continúa también con la gira de ‘Sofocos +’? En la que la acompañan Fabiola Toledo, Teté Delgado y Ana Obregón.
– Con ‘Sofocos’ ya prácticamente hemos terminado. Puede que quede alguna función pendiente, pero lo iré compaginando.
– ¿Piensa disfrutar de Huelva estos días?
– El teatro te da oportunidad de disfrutar de ciudades y sitios que no te dan otros medios. Tienes tu vida en una maleta pero las giras no son lo que eran y el teatro te da tiempo para vivir cada ciudad. En el caso de Huelva, llevo aquí unos días porque tengo una hermana en Mazagón y también tengo amigos y aprovecho y me quedo unos días para ver a la familia e ir a vuestras maravillosas playas.
– Hace un año estuvo grabando en Huelva el corto ‘Fritas’. ¿Qué tal fue la experiencia?
– Sí, era un corto del director Manuel Gomar, con Berta Hernández y Javier Mora, que son compañeros y amigos. El corto está teniendo mucho éxito de público y crítica en festivales, ha funcionado muy bien. Yo soy actriz andaluza, así que todo lo que sea bajar al sur y rodar por mi tierra es un orgulloso. Además, cuando vivimos en Madrid, echas de menos la familia y yo la tengo dividida por distintas ciudades.
– ¿Cómo se presenta el verano a nivel laboral?
– En principio estaré sólo de gira con ‘Gibraltareña’, que es muy completa porque pasamos, por los pronto, por 22 plazas.
– Por último, si desea invitar al público a que acuda al Gran Teatro…
– ¡Claro! Es una función que va a traer un pensamiento muy positivo a la gente que la vea. Se van a reír y emocionar y sentir un tiovivo de sensaciones. ¡Me gustaría que el Gran Teatro estuviera lleno de gente!