Esperanza Fidalgo. El onubense Matías Brea exhibe en el Company Bar 1900 del 16 de julio al 5 de agosto una colección de fotografías de denominada ‘Ganas de volar’. Brea empezó pintando óleos desde joven pero, en el año 2008, descubrió su pasión por la fotografía y decidió comprarse una cámara Réflex.
Aunque es autodidacta, quiso ampliar sus conocimientos, inscribiéndose en la Escuela de Arte y Oficios León Ortega de Huelva en el ciclo superior de fotografía artística. El primer año pudo experimentar en un laboratorio todas las posibilidades que ofrece el utilizar una cámara antigua analógica. Hacía el revelado manual y, aún así, podía manipular la foto y hacer diferentes montajes. El segundo año estudió iluminación en estudio fotográfico, cómo dirigir los focos y los distintos efectos de las luces.
Ha obtenido diferentes galardones, consiguiendo el primer premio en cuatro concursos organizados por la Consejería de Turismo de Huelva y el segundo premio en dos concursos en los que la temática era la Semana Santa, organizados por la Cope, Huelva Televisión y la Asociación Onubense de Fotografía. Y otro premio concedido por el Ayuntamiento de Huelva. Participó en una exposición colectiva en el centro Puerta del Atlántico y le publicaron diez fotografías en la Guía Oficial de Semana Santa.
‘Ganas de volar’ es una serie de ocho fotografías que ha realizado Matías Brea para el proyecto final del ciclo superior de fotografía artística de la Escuela de Arte y Oficios León Ortega de Huelva, inspirada en los cuentos, personajes y leyendas que existen sobre el tema de volar de forma «mágica».
Este proyecto hace volar nuestra imaginación, realizando un repaso por algunos mitos y cuentos que de alguna forma son parte de nuestra cultura visual orquestada por el celuloide, los cómics o la literatura.
El objetivo de este proyecto es crear una ilusión de vuelo en el observador ya que sabemos que lo que vemos es algo totalmente surrealista pero, que con la magia de la fotografía, podemos soñar con volar sin necesidad de máquinas artificiales, permaneciendo los modelos en estado de levitación… como si estuviesen en la ingravidez. Las imágenes de personas volando son una constante en muchas culturas, desde los cuentos infantiles hasta las obras más consagradas de la literatura.
Matías Brea logra congelar instantáneas de vuelo a través de un puzzle de personajes de ficción. Así, entre ellos, podemos ver un ángel con grandes alas de algodón; un guerrero; una bella joven que parece levitar como dormida en un sueño profundo, la cual se enmarca en una panorámica del río Tinto a su paso por Niebla; otra joven aparece en una alfombra mágica que, con un farolillo, busca el horizonte perdido.
En la mayoría de las imágenes, Brea emplea la técnica de congelación de movimientos.
Esta colección fotográfica fue un reto para él por la dificultad que implicaba y porque era un proyecto diferente a otros realizados. Hasta ahora, Brea ha estado haciendo prácticas en un estudio, captando imágenes de bebés, además de reportajes de comuniones.
De cara al futuro, su deseo es continuar con exposiciones porque le apasiona la fotografía artística, presentarse a concursos y aprender cada día más.