Redacción. La capilla del Colegio Colón ha acogido la IV Exaltación de la Saeta ‘Maristas Huelva’ con la que la AMPA San Marcelino Champagnat, con el apoyo del equipo directivo, ha pretendido homenajear a esa copla hecha canto con la que en nuestra tierra se reza a las imágenes que procesionan por nuestras calles, «a esa copla disparada a modo de flechazo contra el empedernido corazón de los fieles», como dijo Antonio Machado.
El acto comenzó con una breve introducción de Jesús Naranjo, vocal de la AMPA, quien dio paso a José Antonio Castilla para que de forma pormenorizada y repleta de sentimientos presentara a los verdaderos protagonistas de la tarde: exaltador y saeteras.
A continuación, Pablo Rodríguez por la Agrupación Marista Buena Madre, Javier Pérez por la Hermandad de Estudiantes y Rafael López por la Hermandad de la Misericordia realizaron, a modo de prólogo, una breve reflexión sobre pasajes del Evangelio y el tiempo de Cuaresma en el que nos encontramos.
La exaltación corrió a cargo de Antonio Cano, quien con un lenguaje sobresaliente y muy inspirado, como es habitual en él, hizo un breve recorrido por la Semana Santa onubense y la historia de la saeta, recorrido entrelazado con anécdotas y vivencias de su dilatada experiencia y con las mágicas voces de dos grandes del género: Victoria Prieto y Tina López, que inundaron el recinto de arte, emoción y sensibilidad.
El acto contó con una magnífica puesta en escena, un lenguaje brillante y ameno, así como con unas impresionantes voces que deleitaron y emocionaron a los presentes. Asimismo, la Capilla del colegio lucía una impresionante decoración, obra de Pedro Vinagre, con la colaboración de Pilar Hernández.
La despedida fue realizada por Juan Manuel Gómez, presidente de la AMPA, quien comentó que con este acto además de difundir la saeta y de disfrutar con ella, se pretende homenajear a personas que, al igual que se hace con esta forma de cantar, transmiten sentimientos y grandeza, canalizan positivamente las dificultades y saben llevar su vida con lo que metafóricamente se puede llamar un “buen compás”, estando dedicada esta cuarta exaltación marista a Juan y Begoña, miembros de la junta directiva de la AMPA, y con ellos a todas las familias del colegio que por una u otra causa han pasado o pasan por momentos de especial sensibilidad.