El Festival de Danzas de Villablanca, un escaparate único del verano onubense

HBN. Villablanca se ha convertido desde hace más de tres décadas en el corazón de Huelva cuando se habla de danza y de tradiciones. Porque la localidad acoge cada año en el mes de agosto uno de los acontecimientos culturales más destacados del calendario festivo de la provincia de Huelva: su Festival Internacional de Danzas.

Se trata de una de las citas ineludibles del verano onubense, una propuesta que nunca defrauda tras haber sabido consolidarse y adaptarse al paso del tiempo. Porque el certamen ha logrado conservar todo el sabor de sus orígenes, de aquel mes de agosto de 1980, cuando se celebraba su primera edición. Desde entonces hasta ahora, el festival se ha convertido en un referente cultural en la provincia de Huelva, que está declarado como de Interés turístico de Andalucía.

El impulsor del festival fue Félix Belzunce Mancebo, recientemente fallecido y que ha recibido un homenaje este año del certamen. Y es que Villablanca suele llamar la atención sobre personalidades y países que han contribuido al desarrollo y consolidación de esta propuesta cultural. Por ejemplo, en su 25º Aniversario recibió un reconocimiento la bailaora Cristina Hoyos.

La solidez alcanzada a lo largo de estos años se traduce en un encuentro entre culturas, un espectáculo que cada día exige mayor entrega y dinamismo, un evento que requiere unos recursos humanos especializados y una infraestructura adecuada a las exigencias y la calidad de los grupos que nos visitan.

Y es que lo que fue en su momento una iniciativa concreta, hoy es un evento cultural de destacado contenido sociocultural. Un mecanismo de difusión del patrimonio cultural, musical y folclórico del mundo, haciendo posible el acercamiento entre los pueblos. En definitiva, un evento que favorece la conservación y difusión de la interculturalidad mediante la danza.

De esta forma, una selecta muestra del folclore de todo el mundo ha pasado por Villablanca desde los años ochenta hasta hoy. Este hecho he permitido que, cada mes de agosto, la Plaza de la Constitución de la localidad se convierta en un escenario multirracial que descubre danzas y músicas de lo más variadas.

Todo ello contribuyendo a la recuperación del folclore, uno de los principales objetivos de esta propuesta cultural del verano de Huelva. Así, todos los años, el festival abre su programación con la actuación de la ‘Danza de Los Palos’ de Villablanca, un símbolo de la localidad que cuenta con nueve mudanzas o cambios. La primera simboliza el encuentro entre los pastores. También destaca otra donde los danzantes entrecruzan los palos para que, en otros tiempos, paseasen por debajo los Marqueses de Ayamonte. En el último cambio, danzan de rodillas en prueba de máxima adoración a la Virgen.

Ahora, tan sólo falta disfrutar un año más de la XXXV edición del Festival Internacional de Danzas de Villablanca, que se celebrará hasta el 31 de agosto con la participación de diez grupos internacionales, con más de 250 danzadores procedentes de cuatro continentes.

Los días grandes del evento son el 28 y 29 de agosto, además de que el festival contará con extensiones en otros municipios como Villanueva de los Castillejos, Luz de Tavira, Almonaster La Real, Palos de la Frontera, Zalamea La Real, San Juan del Puerto, Bonares y el Centro Penitenciario de Huelva.

El alcalde de Villablanca, José Manuel Zamora, ha subrayado que participarán grupos de España (Villablanca y Badajoz), Perú, Ecuador, España, Portugal, Indonesia, República de Buryatia, Sudáfrica, República de Moldavia y Polonia, y ha agradecido la colaboración del ente provincial.

En definitiva, con una trayectoria de treinta y cinco ediciones, Villablanca ha demostrado a lo largo su existencia que es una de las manifestaciones más ancestrales y puras del hombre, la danza y el folclore como puesta en escena de valores, costumbres, ritos, leyendas y manifestaciones sociales. Ahora toca disfrutar de las actuaciones este mes de agosto.