Federico Soubrier se inspira para su nueva novela en la playa de Rompeculos

Redacción. La novela Muerte en Rompeculos de Federico Soubrier, cuya trama se desarrolla en Mazagón, ha sido utilizada como medio para poner en valor el inmenso potencial que tiene esta localidad y la provincia de Huelva, de cara a actividades deportivas, ocio y gastronomía, usando como base para su desarrollo los magníficos enclaves paisajísticos de los que disponemos en nuestra espléndida y variopinta geografía.

Con la recreación de una inusitada casuística delictiva, el autor saca a relucir una amalgama de problemáticas sociales, que aborda tanto cuestiones de índole sexual como temas relativos a la inmigración, conflictos relacionados con  drogas y alcohol en la adolescencia, la lucha diaria por la superación de las discapacidades físicas o las tramas políticas con sus problemas de competencia.

El fotógrafo Ricardo Leiva ha colaborado en esta obra con numerosas ilustraciones, tratadas y pasadas a negativo a modo de láminas, aportando un componente visual que guía la capacidad imaginativa del lector, aproximándolo de alguna manera a la realidad física y dejando a la vez que sea quien aporte el colorido necesario y rellene mentalmente los espacios creativos entre lugares y situaciones.