José Manuel Alfaro/ Sección de ficción Cuaderno de Muleman. Todo el mundo recuerda ese problema matemático que era la primera aproximación al concepto de física, de velocidad igual a espacio dividido entre tiempo. Un enunciado en el que podíamos leer: si un tren sale de un punto A a las 18:00 h hacía el punto B a una velocidad de 150 Km/h y otro sale del punto B a la misma hora, pero en sentido contrario a 150 Km/h. Si la distancia que separan el punto A del B es de 47 Km, calcula la distancia del punto A y del punto B en el que chocaran los dos trenes que viajan por la misma y única vía que une ambos puntos.
Lo que podría parecer en el papel un problema sencillo, en la vida real no lo es, al menos eso es lo que demuestra la experiencia de lo que ha sucedido esta mañana en Villalba del Alcor, donde ha llegado un tren que salía de la capital y que por circunstancias que se desconocen y que siguen investigándose ha terminado en esta localidad del Condado, en la que los vecinos sorprendidos han visto aparecer de la nada un tren a última hora de la tarde en medio de un espectacular ocaso de granas y rosas.
Unos hechos que podrían estar relacionados también con los ocurridos hace también hace unos días en los que un tren que viajaba hacía la capital, por circunstancias que aún se desconocen, cambio súbitamente de dirección obligándolo a maniobrar para retroceder. Unos hechos que se suman también a los continuos cortes de suministro eléctrico de las catenarias ferroviarias, los retrasos endémicos, la oferta de un servicio regular de trenes, horarios imposibles o la aparición de este tren en Villalba del Alcor, que se empieza a investigar como un caso típico de fenómeno paranormal.
Aunque las investigaciones de los técnicos permitirán finalmente saber cuáles son las causas que han provocado este increíble suceso, en Villalba del Alcor, se muestran esperanzados de que este hecho fortuito permita hacer realidad una de sus más ansiadas reivindicaciones históricas, la de contar con un verdadera estación de tren en la localidad a la que por fin llegue el ansiado tren de alta velocidad del que llevan años hablando en el pueblo y que parece que solo podría llegar por error como ha sucedido.
Una llegada de la alta velocidad a Villalba del Alcor que pondría en el mapa a esta localidad, que está cerca de ningún lugar y lejos de todos y que permitiría poner en valor la riqueza agroindustrial, cultural, patrimonial y natural de lugares tan importantes como la finca la “Estaquilla”, la Iglesia de San Bartolomé que debe su origen a la ciudad de Ostur, el monasterio de frailes de Santa María de la Antigua de 1588, el convento de monjas calzadas de San Juan Bautista de 1619. Los viajeros que llegaran a esta estación de Villalba, podrían además vivir intensamente la devoción y sentir religioso que desde hace siglos se procesa todo el año a su patrona Santa Águeda y especialmente en sus fiestas del mes de febrero, las fiestas de la Virgen del Carmen, las cruces de mayo y sus típicos romeritos o disfrutar de una ruta inmersiva por los caminos que circunscriben este rincón de la campiña.
Pero mientras llega la alta velocidad a la localidad villalbera, tanto los técnicos, funcionarios, como las fuerzas del orden y seguridad de la localidad seguirán centrando sus esfuerzos en conocer las causas que provocaron la aparición de este tren turístico, que debía de estar haciendo una visita guiada por la capital y que por un error matemático termino misteriosa y mágicamente en la Avenida Andalucía de Villalba del Alcor.