J.A. de M. Aparcada no exactamente en la Plaza de San Pedro, si no en la entrada del mítico porche de su Iglesia desde la calle Licenciado Juan Agustín de Mora de Huelva. Allí estaba una antigua furgoneta DKW F89 L, en un lugar del que hoy sería rápidamente desalojada por la grúa municipal.

Aunque no se distingue bien, quizá fuera el modelo micro-bus de la gama, que fue producida en Europa (incluida España, en Vitoria) desde 1949 hasta 1962. Por tanto, su plácido estacionamiento en nuestra emblemática e identitaria plaza no nos da muchas pistas respecto a la antigüedad de la fotografía -usada de postal-, que por las vestimentas de los ‘figurantes’ que aparecen debe estar entre finales de los sesenta y principios de los setenta.

Evidentemente la presencia de la furgoneta no es lo más relevante. La imagen, con el marco tradicional de la Plaza que ha protagonizado tantas fotografías, ofrece muchos detalles interesantes. El pavimento que siempre hemos conocido, y que con tan absurda intención se ha proyectado sustituir, le daba ya por entonces armonía a la superficie de la plaza, centrando un conjunto super equilibrado. Las espectaculares buganvillas escoltan su interior, coronado con esas alegres palmeras de una elegantísima ‘plaza de pueblo’, nuestra Plaza de Pueblo.

Es llamativa en la imagen la cuesta de la citada calle Juan Agustín de Mora. No muestra el adoquinado que posteriormente tendría, sino una irregular calzada de cantos rodados -no se aprecian, pero nos lo ha apuntado un vecino de entonces- con malas yerbas crecidas. Se supone que serían días no muy lejanos de una etapa de lluvias, dada esa circunstancia.

Justo en el momento en que el fotógrafo tomó la imagen, desde probablemente la azotea del edificio frontal a la fachada de la iglesia, una mujer viniendo de arriba no pasa por la trasera del vehículo. Lo hace por el estrecho margen que hay entre la parte delantera de este y la pared exterior del templo.

Si el reloj no estaba estropeado la toma se hizo a las diez menos veinte de la mañana. Tiene toda la pinta de ser verano o casi porque la presencia de niños y jóvenes a esa hora no sería tal en jornada escolar. También pudiera ser festivo pero por mera intuición pensamos que no.

A la derecha de la imagen un señor se asoma a la puerta del Economato Laboral que allí tenía el Puerto de Huelva. Estaba, por tanto, abierto, algo no propio de festivo.

La monja paseando con una señora resulta de lo más pintoresco. Forma parte del paisaje de una encantadora y tranquila plaza que preside el santo Manuel González -entonces beato- desde mayo de 1961.

Hay manchas de agua alrededor del parterre en el que se situaba el monumento del que fue arcipreste de Huelva. Parece como si acabasen de regarlo. Mas de dos decenas de personas aparecen en la fotografía, solo hay que fijarse. Una joven en la puerta del edificio parroquial ataviada rigurosamente de blanco con lo que parece un vestido sin mangas nos refuerza en la idea de que era verano.

Quizá algún lector pueda comentar la fotografía e identificar a la curiosa furgoneta o a su propietario. Qué plaza más bonita. Se merece que la arreglen, que la cuiden, pero que la dejen en Paz.

Plaza de San Pedro, Huelva.