Tiny house, cabaña en el fondo del jardín o en un bosque, los espacios modulares están de moda. En total contradicción con la sociedad de consumo, estos pequeños espacios ofrecen modelos de vida minimalistas, donde cada centímetro cuadrado se ocupa con moderación y cuidado. Si los expertos en cabañas de madera aprovechan esta tendencia, ¿por qué son tan populares las cabañas de madera?
Naturaleza y calma: el máximo lujo para los turistas
¿Una villa de 5 dormitorios con piscina y pensión completa? No, pero una cabaña en forma de capullo perdida en medio de la naturaleza sí. La tendencia ya no es tan anecdótica como parece. Varios estudios muestran que el mercado de las viviendas modulares asciende ya a 1.600 millones de euros y, de aquí a 2030, debería representar una cuarta parte de las nuevas construcciones.
¿Es una señal de rechazo a la sociedad de consumo? En cualquier caso, es una muestra de nuestro gusto creciente por la calma y el aislamiento y la prueba de una verdadera sensibilización en torno a las consecuencias dramáticas del turismo de masas.
Irse de vacaciones en una cabaña sí, ¡pero lujo!
Muchos arquitectos se apasionan por el tema. La agencia noruega Helen & Hard, por ejemplo, ha diseñado las cabañas Woodnest en Odda (Noruega), en el fondo de un fiordo de 38 kilómetros de largo. Estas pequeñas cabañas de madera, suspendidas a 6 metros del suelo, se pierden en medio del bosque.
En Inglaterra, el diseñador Sebastian Cox ha creado una cabaña en Hertfordshire con revestimiento de alerce quemado y techo de tejas, mientras que Peter Pichler ha diseñado un grupo de lujosas casas en los árboles para un complejo turístico en Austria.
En Asia, la arquitecta Thilina Liyanage ha diseñado increíbles casas en forma de loto en bambú. Las estructuras se elevan sobre pilares curvos de bambú y albergan una zona de estar en la planta baja, mientras que la escalera envuelve la estructura para asegurar la planta superior, donde se encuentra el dormitorio.
Vivir en una Tiny House
Si la locura en las redes sociales por estas casas tan «instagrammables» es palpable, la realización es difícil: a las dificultades de la construcción hay que sumar la declaración de la vivienda y estar atento a la normativa urbanística y a los permisos de obra. Por no hablar de la conexión al agua, la electricidad y el saneamiento.
Otra alternativa: la cabaña de madera
Cada vez más atractiva y encantadora, la cabaña de madera se inscribe en la tendencia de las viviendas modulares. Estas casetas que van de 11 a 44 m², han dejado atrás su aspecto anticuado y se han modernizado. Algunas de ellas no tienen nada que envidiar a las otras construcciones modernas de lujo.
Las cabañas de madera acompañan el entusiasmo de los occidentales para comprar residencias en las afueras de las ciudades para tener más espacio, mejor calidad de vida y más tranquilidad. Casa o cabaña, el futuro de la vivienda está lejos de los humanos, lo que nos gusta, hasta cierto punto.
