J.A. de Mora. Como algunos allí comentaban diez años parece poco, pero en la memoria de los que han trabajado para que esta carrera tan onubense como Gestión Cultural fuese una realidad en nuestra universidad… diez años han dado para mucho.
Conmemoración del décimo aniversario de Gestión Cultural con un Salón de Grados de la facultad de Humanidades repleto. Egresados, alumnos y profesores celebrando este hito que habla de ilusión, constancia, creatividad, vocación de servicio a una sociedad que precisa de la Cultura como el comer.
Y decimos que esta carrera universitaria es tan onubense porque fue el primer lugar de España donde se implantó, algo carente de casualidad, como recordó Rafael Morales, presidente de la GECA -Gestores Culturales de Andalucía-, dado que en Huelva igualmente nació esta corporación de gestores culturales andaluces.
El acto institucional, presidido por la rectora de la Universidad, Mª Antonia Peña, contó con varias intervenciones, encabezadas por la de la decana de Humanidades, Nuria de la O Vidal. Le acompañaban inicialmente en la mesa los decanos anteriores que el centro ha tenido desde que la titulación fue propuesta Zenón Luís Martínez, Juan Manuel Campos y Alfonso Doctor.
Los ex-decanos, por orden cronológico, fueron recordando los momentos, algunos complejos, vividos en torno al proyecto y posterior implantación del Grado en Gestión Cultural.
Zenón Luís habló de la elaboración de los planes y la configuración del proyecto. Campos comentó la experiencia de adaptación que tuvieron que experimentar los profesores y los alumnos ante una carrera inédita. Y Alfonso Doctor, al que le correspondió comandar la renovación de la acreditación. Este último, en línea con lo señalado por sus antecesores, abundó en la generosidad de los profesores, con culturas distintas como las de Empresariales y Humanidades -facultades implicadas- y en la de los alumnos, que a su natural exigencia sumaron una razonable comprensión asociada a al escenario de los primeros pasos de la titulación.
La rectora nuevamente quiso destacar la importancia de las Humanidades, su condición de elemento esencial en nuestra sociedad. Y en particular valoró que el Grado de Gestión Cultural tiene unas posibilidades extraordinarias en el ámbito laboral. Cada uno de los intervinientes hasta ese momento resaltaron que esta carrera había llegado a este punto, no sin dificultades -crisis económica al comienzo de su implantación, pandemia y actual guerra-, con todas las posibilidades de desarrollo abiertas de par en par.
También se destacaron los valores puestos de manifiesto en el alumnado y en los egresados, que constituyen para todos un emotivo ejemplo. En representación de ellos, precisamente, se situaron en el atril Laura del Valle Mesa y Paula Chaguaceda. Las jóvenes expresaron su satisfacción por haber cursado estos estudios, en el convencimiento absoluto de haber acertado en su elección.
Antes, la vicedecana y organizadora de la conmemoración, Dominique Bonnet, realizó una descripción de lo que acontecería y habló de los alumnos y su implicación. Mostró su emoción por el resultado de todos los que habían trabajado por una titulación en la que cree, al igual que los que estaban en el acto, profundamente.
El programa de la conmemoración contemplaba, a continuación del acto institucional, la inauguración de una exposición de fotografías y pintura con el ‘legado inglés’ en Huelva y su provincia como argumento. La iniciativa y su desarrollo había correspondido a un grupo de alumnos de cuarto de la titulación. Quedó inaugurada y permanece en la antesala del Salón de Grados.
El último apartado de la conmemoración estaba anunciado como una ‘perfomance’ organizada por Ana, una alumna de primero del grado. La perfomance programada, que resultó un secreto guardado con celo previamente, consistió en un desfile de modelos titulado ‘metamorfosis’.
La diseñadora, onubense, Mariaan Cotton presentó a los asistentes a cuatro modelos con creaciones que representaban la evolución de la mariposa desde la crisálida.
El desfile tuvo lugar en el patio de acceso al pabellón que ocupa la facultad de Humanidades. Seguidamente en el mismo lugar se sirvió un refrigerio. Tiempo para permitir un distendido intercambio de comentarios y valoraciones de un hecho tan importante como este décimo aniversario que celebramos.
