Redacción. El Área de Salud Mental del Hospital Juan Ramón Jiménez ha organizado este jueves la I Jornada sobre Abordaje Integral del Suicidio en Huelva para debatir y poner en común las distintas formas de actuar ante el riesgo suicida, con el objetivo de mejorar las intervenciones desde los distintos ámbitos socio sanitarios.
El gerente del Hospital Universitario Juan Ramón Jiménez, José Luis Bonilla; junto a Luis Pizarro, adjunto a la coordinación del Plan Integral de Salud Mental de Andalucía (PISMA), Luis Pizarro; el presidente de la Asociación de Familiares y Personas con Problemas de Salud Mental de Andalucía (Feafes), Manuel Movilla; y la coordinadora de Cuidados de Salud Mental del citado centro hospitalario, Luisa M.ª Cruz, han inaugurado este encuentro que ha reunido a más de 150 participantes entre profesionales sanitarios, representantes de la Fundación Pública Andaluza para la Integración Social de Personas con Enfermedad Mental (Faisem) y la mencionada Feafes.
Entre otros temas de la I Jornada sobre Abordaje Integral del Suicidio, durante todo el día de hoy se llevado a cabo una actualización sobre la actuación en Urgencias ante la ideación suicida, la necesidad de trabajar en la prevención del suicidio, la intervención psicológica ante el riesgo suicida, el abordaje de la conducta suicida en psicosis desde la perceptiva de la enfermera especialista o el panorama actual en los adolescentes, ya que en 2020 ha sido la primera vez que España ha alcanzado los 14 suicidios de menores de 15 años (7 niños y 7 niñas), duplicando los casos de 2019.
Tal y como ha trasladado José Luis Bonilla, “es importante recordar que a menudo es posible prevenir el suicidio y cualquier persona puede ser parte activa de la prevención”. Así, ha continuado, “todos podemos desempeñar un papel en el apoyo a las personas que experimentan una crisis suicida o las que están en duelo por suicidio”. “En este contexto, el estigma es una barrera importante para la búsqueda de ayuda. Cambiar la narrativa en torno al suicidio mediante la promoción de la esperanza puede crear una sociedad más compasiva en que las personas que sufren se sientan más cómodas a la hora de buscar ayuda. Todos podemos hacer algo para vivir en un mundo donde aceptamos la existencia del suicidio y donde todos podemos hacer algo para ayudar a prevenirlo”, ha finalizado.
Ante esta situación, el Servicio Andaluz de Salud continúa avanzando en la formación de profesionales para detectar precozmente el suicidio. Entre otras acciones, en 2021 se han realizado dos ediciones del curso ‘Detección precoz y abordaje de pacientes con conductas suicidas’, organizado por la Fundación para el Avance Tecnológico y el Entrenamiento Profesional de la Consejería de Salud y Familias, que han permitido formar a 500 profesionales de salud mental y de otros ámbitos como Atención Primaria, Medicina Interna y Medicina Intensiva.
Además, se han celebrado ya dos ediciones del curso ‘Prevención del suicidio: Formación para formar en salud mental’, en cooperación con la Escuela Andaluza de Salud Pública, y se hará otra edición este año. El objetivo general de este curso no es otro que reflexionar sobre las competencias y actitudes de los profesionales de Salud Mental en relación a la detección, prevención e intervención ante la conducta suicida e identificar claves y herramientas para la intervención en riesgo suicida. Se han formado profesionales en todas las áreas asistenciales de Salud Mental.
Situación en Andalucía
Según datos de la Fundación Española para la prevención del suicidio, a través del Observatorio del Suicidio, durante el año 2020 se produjeron 793 suicidios en Andalucía, lo que indica un promedio de un suicidio cada 11 horas. Por edades, el grupo que cuenta con la cifra más abundante es el comprendido entre 40 y 59 años.
A nivel nacional, en 2020 se ha alcanzado el máximo histórico de suicidios desde que se poseen dato, 3.941. Estas cifras hacen que el suicidio siga siendo la principal causa de muerte no natural en España, produciendo más del doble de muertes que los accidentes de tráfico.
En este sentido, los profesionales subrayan que el contexto pandémico se ha dejado sentir y que son muchos los facultativos que están mostrando su preocupación por la alarmante subida de cifras que han registrado las tentativas de suicidio durante el pasado año, fundamentalmente en la población infanto juvenil.
Para intentar paliar los efectos de la pandemia en la salud mental de las personas que han pasado el Covid-19, la mayoría de hospitales cuentan con atención psicológica y psiquiátrica en las consultas de seguimiento de la enfermedad y se está trabajando en una estrategia de atención específica para las secuelas de la misma en este nivel de atención.