Miguel Mojarro. En nuestra serie sobre casinos, en el diario Huelva Buenas Noticias, publicamos en su día (3 marzo 2018) un artículo rindiendo homenaje humilde a nuestro gran dibujante Forges:
https://huelvabuenasnoticias.com/2018/03/03/forges-casinero-de-la-sonrisa/
Hoy lo traemos de nuevo con ocasión de las recomendaciones de lecturas en que estamos. Y no es poco el mérito que tiene el dibujante por excelencia. Ya, incluso, por antonomasia. Porque ha dado nombre común a los dibujantes de calidad. Su nombre propio, Forges, se ha convertido en el que designa a los buenos dibujantes cuando se les menciona dándoles ribete de calidad. Ser un «Forges» es una alabanza de todos deseada cuando mencionan la obra de un dibujante de mérito y valor.
Por cierto, eso es antonomasia, no el uso que algunos utilizan de esta palabra en los medios (orales y escritos) en lugar de «por excelencia», cuando quieren designar otra cualidad, distinta de haber generado una antonomasia. (Esto es aprovechar que el «Pisuerga pasa por Valladolid» para meter una cuña cultural, morcilla dirían los actores).
Siguiendo con lo nuestro, Antonio Fraguas de Pablo, desde 1942 y hasta 2018, Forges, ha sido componente de una generación de humoristas gráficos actuales, que puede clasificarse como la Edad de Oro del humorismo grafico español. Máximo, Peridis, Mingote, Ibáñez (en su modalidad y estilo), «el Roto»… y muchos otros (bueno, algunos), que han colocado a la prensa española en primera línea de la calidad gráfica europea.
El diario Pueblo, Informaciones, Hermano Lobo, El Jueves, el Mundo, Diario 16, El País, con Luis del Olmo, Javier Sardá, Gemma Nierga, «Pepa» Fernández, son ejemplos de colaboraciones en su dilatada actividad de humorista de la actualidad, derrochando calidad gráfica y analítica de la sociedad actual. Sobre todo esto, que es compañía permanente de sus dibujos.
Bueno, pues este señor, durante una dilatada vida profesional, nos ha dejado una cosecha increíble de publicaciones, además de situaciones televisivas y radiofónicas que nos permiten el goce de su arte como dibujante y sociólogo de nuestro entorno.
Mi amigo Marcelo, entrañable compañero de viajes casineros, siempre comienza por leer sus viñetas en los periódicos del Casino, como antesala de las posteriores charlas con sus amigos. Muchas de estas charlas, ricas e interesantes, se fundamentan en las viñetas de estos magníficos dibujantes y analistas.
En uno de estos casinos, el Club Inglés de Bella Vista, en Riotinto, sentado mientras esperaba a mi amigo Alfredo, pude disfrutar de dos privilegios: La huella estética dejada por los ingleses y el magnífico marco que construyeron para la lectura.
Tanto dentro de su salón, como fuera, a la sombra de su iglesia anglicana, los espacios parecen diseñados para una lectura grata, porque el sosiego de ese entorno histórico propicia el disfrute. Un libro puede ser compañero entrañable en la soledad de nuestra habitación, tanto como en espacios que son patrimonio de la Historia. Y de nuestro ocio, que también el ocio tiene derecho a poseer patrimonios.
Es Riotinto zona de casinos, de una riqueza social increíble, en la que convivieron salones con sabor a mineral y otros con aromas de estética cultural. En Riotinto es bueno hacer una ruta casinera por todos sus salones, para terminar sentado en el borde impresionante de Corta Atalaya. Nosotros, Marcelo y yo, hicimos este recorrido muchas veces y siempre con el mismo sentimiento final: Hay que volver pronto.
Regresamos a la literatura gráfica de humor, para quedarnos con uno de sus representantes mas significados. Tenemos que elegir uno, por aquello de simplificar la recomendación. Nos quedamos con Forges, no como el mejor, que eso es difícil de establecer, sino por cercanía como lectores de sus publicaciones. En los estantes de nuestra biblioteca hay un amplio repertorio de sus libros, que son manoseados con garantía de placer. Libros sobre «La sociedad actual», sobre «La historia de España», «Informática para torpes», … y muchos más, que pueden ser considerados como joyas en las mesas de nuestros casinos. Por algo se dice (y es cierto) que la prensa de los casinos se empieza a leer por la página de las viñetas. Ellos sí que saben …
En Forges no es necesario entrar en la mención de premios, nombramientos, galardones, … . Como muestras, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes y el Premio Nacional de Periodismo Pedro Antonio de Alarcón, … , y más, mucho más, que no es necesario reseñar aquí por obvio y bien informado en todas las entradas en Internet que realicemos.
Aquí nos basta con decir algo, muy humildemente, pero con toda la claridad que nos permite nuestra convicción de lectores confesos: Forges es y será motivo de placer lector desde cualquiera de sus publicaciones. Nosotros no podemos recomendar ninguno de sus libros (Los tenemos casi todos), porque seriamos injustos con el resto de sus obras.
Nos quedamos con una recomendación encarecida, obligada, con la humilad que reconoce nuestra serie de «Lecturas casineras», pero con una convicción: Forges es un lujo de nuestro magnífico panorama del dibujo social y debería ser lectura de cabecera de todo aquel que se atreva a confesarse lector. De lo que sea, pero lector.
Forges es patrimonio cultural de los medios de comunicación de la España actual.
Y de los casinos.
Grupo Azoteas