Inés Martín. «La cantidad de recetas que podemos hacer a partir del azúcar y del chocolate», eso expresa Tirado que descubrió el mundo de la cocina hace apenas tres años, que cada día se levanta con la necesidad de querer saber más sobre la gastronomía. Le hizo falta orientar su carrera académica hacia otro lado para descubrir su verdadera vocación: el mundo culinario.
Nunca antes se lo había planteado y es ahora cuando tiene los pies sobre la tierra y es consciente del alcance que pueden tener sus proyectos. Paso a paso y por eso continúa sus estudios de Pastelería, chocolatería y repostería artística tras haber finalizado Gastronomía. Los postres son el punto fuerte de Manuel y los incluye entre sus planes de futuro. El joven admite que es una persona que no tiene confianza en si mismo pero fue su candidatura al concurso que celebra la empresa almeriense, Bimi. La que le otorgó tener más confianza en si mismo y saber que no debemos ponernos límites.
«La cocina, además del hecho de cocinar, puede llegar a emocionar» y eso lo que mantiene vivo a Manuel y lo que le ayuda a seguir peleando día tras día por su sueño de llegar a lo más alto. El riotinteño destaca el gran trabajo de los chefs más reconocidos porque «gracias a ellos, que escriben y dan sus recetas, nosotros las conocemos». «Yo no podría estudiar. Sin ellos sería un mundo desconocido» recalca Manuel que tiene como referente a Ángel León «por sus valores» y Martín Berasategui. Destaca a Paco Torreblanca en pastelería.
No hay límites para Manuel y eso lo ha aprendido a lo largo de su formación. Ahora se prepara para cocinar un plato que le lleve a conseguir una beca de Le Cordon Bleu a través del Premio Promesas de la alta cocina. Ya está entre los 50 candidatos después de haber sido elegido por su expediente académico y su vocación. Ahora debe preparar una balotina de ave con una tartaleta de tomate concassé y alcachofas y una guarnición libre, que ha de estar orientada a la región de dónde proceda o viva el candidato. En su caso cocinará unas migas con naranjas y hierbabuena.
La elaboración de este plato deberá ser grabada y será la escuela madrileña Le Cordon Bleu quien inicie un nuevo proceso en el que los videos de todos los candidatos serán subidos a Facebook, para que sea el público quien elija el mejor plato que otorgará el pase a los diez mejores. En la siguiente fase, los elegidos deberán viajar hasta Madrid a la propia escuela que donará una beca de 23.000 euros para estudiar Cocina o Pastelería al primer clasificado y 8.000 euros para realizar un curso de cocina al segundo premiado.
La curiosidad es la mejor receta. Manuel descubre cada día un nuevo plato del amplio abanico que ofrece la gastronomía, sobre todo, lo que más le apasiona, la repostería. En España «a la pastelería no se le da tanta importancia» asiente a cerca de este ámbito que pese a ser tan popular, se tiene normalizado y acentúa que su sueño es «poder montar un restaurante solamente postres. No debemos esperar a la cena para poder degustarlo».
Antes de cocinar se sienta, coge papel y lápiz y dibuja el plato que quiere realizar acompañado de sus bandas sonoras: el flamenco o los Carnavales de Cádiz. Sin olvidar los productos que proporciona la gastronomía onubense como el marisco, el gurumelo o el jamón.
Manuel Tirado se dispone a dar su mejor versión para poder conseguir todas sus metas: lograr la beca de Le Cordon Bleu para poder hacerse un hueco entre los mejores.
