Redacción. La romería tiene una vinculación especial con el Belén Viviente y con el terremoto del cabo de San Vicente 1969. En efecto, con motivo del terremoto de 1969, sufrido en toda la provincia, el pueblo de Beas salió indemne del mismo, siendo la ermita de Nuestra Sra de los Clarines la única que quedó muy afectada. Los beasinos, en acción de gracias por no haber sufrido ningún daño a pesar de la virulencia del seísmo, acudieron en romería el último domingo de febrero de 1970. Ese mismo año, y para poder reparar la ermita, la Hdad de Clarines abrió el primer Belén Viviente de Beas. Son pues, 50 años de romería chica los que se celebran este año.
La romería partirá a las 10 de la mañana por el camino de los Huertos, y tras el rezo del Ángelus, llegará a Clarines a las 14 horas. Por la tarde se rezará el rosario a las 21horas y el domingo, se celebrará la misa de acción de gracias a las 12 de la mañana. En dicha misa tienen un protagonismo especial los llamados “ QUINTOS”, que son los chicos y chicas que este año cumplen 18 años.
La tradición de los Quintos se remonta al siglo pasado, cuando los muchachos eran llamados a filas para hacer el servicio militar. El día que los quintos iban a tallarse y medirse, solían pasear juntos, cantando coplas ( que hablaban de sus vidas)por las calles. Esa tradición se ha mantenido, a pesar de que el servicio militar obligatorio fue derogado a finales del siglo XX. Los quintos de hoy en día, celebran su mayoría de edad, presentándose ante la Virgen de los Clarines , habiendo incorporado desde hace unos años a las chicas.
Durante todo el mes de febrero los quintos pasean por el pueblo, cantando las típicas canciones y luciendo sus maravillosos palillos con moñas. La quinta de este año pretende dar contenido a su mayoría de edad y actuar responsablemente. Por eso, han plantado un árbol en el parque municipal y han visitado la residencia de ancianos. Con ello quieren mostrar su compromiso con la sociedad y con el medio ambiente.
Además, se presentarán como todos los años ante la Virgen de los Clarines, a la que dedicarán una copla y harán una ofrenda floral, además de un obsequio. Y lo más bonito , chicos de distintas confesiones religiosas se unen en esa ofrenda, mostrando así su interculturalidad y la integración en el pueblo de personas de todas las razas y religiones.