José Manuel Alfaro / ‘El Cuaderno de Muleman. El pasado viernes, se conoció la noticia de que un filántropo de la localidad tiene en proyecto organizar este otoño el primer congreso de mujeres y hombres centenarios de la provincia de Huelva. Un congreso que sufragará la fundación que lleva su nombre y que cuenta con el patrocinio de las principales instituciones públicas, así como las empresas más importantes de la zona. El congreso cuya fecha no está definida, pero que se celebraría a finales de noviembre, sería el primero de estas características que se organizaría, no solo en la geografía nacional, sino que no se conocen precedentes de haberse celebrado en ninguna otra ciudad del mundo.
Aunque aún quedan muchos detalles por definir, dada la complejidad del evento, lo que de momento si está claro es que Beas se presenta como la ciudad mejor preparada para albergar un congreso de estas características, que convertiría a esta ciudad de la campiña onubense en la más longeva por habitante de todo el mundo. Un congreso, que se está diseñando para que se desarrolle durante cuatro días y al que se espera la llegada de los conferenciantes más importantes del mundo en el campo del envejecimiento activo, así como de al menos 143 mujeres y hombres centenarios que aún viven en la provincia de Huelva, de las cuales el 87% son mujeres y el 13% hombres. Un conglomerado humano, que hará posible que en esos días la localidad vea incrementados sus años en más de 14.300, convirtiendo a Beas en un escaparate de la longevidad mundial, con la media de edad por habitante, más alta del planeta. Este diario ha querido recoger a continuación, en una entrevista a uno de los filántropos más importantes de la provincia, los principales detalles de uno de los eventos de la provincia más esperados para este 2020.
-¿Cómo se le ocurrió la idea del congreso?
-Cuando alguien como yo, que lleva toda la vida trabajando y exprimiendo el dinero hasta aumentar los ceros de tu cuenta hasta límites que nunca creías que ibas a alcanzar. Llega un momento en el que los años empiezan a pesar más que la cuenta de resultados de tus empresas y empiezas a darle más valor a las cosas inmateriales, como el abrazo de tu nieto, un día tranquilo en el campo viendo los toros pastar o una cerveza en el bar donde chupaba los huesos de las aceitunas hasta la extenuación, mientras veía como el Generalísimo inauguraba el Polo Químico de Huelva. Es una época de mi vida, donde te hace reír el salto de los saltamontes o el vuelo de las mariposas y empiezas a tener cierta atracción por acariciar y criar gatos. Los años te han demostrado que no eres invencible y decides devolver a la sociedad un poco de lo mucho que le has quitado. Y qué mejor que compartirlo con los mayores, con esas mujeres y hombre centenarios que lo dieron antes todo por mí, que cuando ellos tenían veinte años y andaban huyendo de la guerra, yo aún estaba atado a la teta de mi madre. Esta es la razón fundamental, que me impulsa a hacer este congreso que reunirá a los 143 mujeres y hombres centenarios que aún viven en esta provincia.
-¿Por qué Beas?
-Este pueblo reúne unas características excepcionales, está bien conectado y con la nueva variante que acaban de abrir hace unos meses, estamos a menos de 10 minutos con una UVI móvil del hospital de referencia más cercano. Es un punto bien conectado con todos los pueblos de la provincia, que nos permitirá desplazar a un hombre de 103 años del Rosal de la Frontera hasta Beas en menos de 2 horas. Además, es un pueblo cómodo para pasear o empujar sillas de ruedas, su centro urbano apenas tiene cuestas y el paisaje de la campiña en esa época es bastante agradecido, tanto o más como las suaves temperaturas que nos suelen acompañar en esta época y que evitan cuadros de deshidratación o enfriamientos mortales. Tenemos por tanto un lugar con muy buena conexión, acogedor y sobre todo hospitalario, no hay gente más abierta y solidaria que la gente de Beas, capaces de volcarse por cualquier causa que lo merezca, quizás el ejemplo más claro de esta filosofía beasiana sea la organización de año tras año del Belén viviente, que se ha convertido en Navidad, en el acontecimiento social no solo del pueblo, sino de toda una provincia.
-¿En qué época se desarrollará?
-En principio en el proyecto que hemos redactado la fecha que hemos puesto ha sido noviembre, nos parece la mejor época, la temperatura acompaña y aunque los días son más cortos, las noches aún son agradables para salir dar una vuelta, no es tiempo ni de bronquitis, ni gripes, que puedan causar afecciones graves respiratorias, algo que podría poner en riesgo la vida de muchos de los asistentes al congreso.
-¿Está preparado el pueblo para organizarlo?
-El pueblo cuenta con todo lo necesario para organizar esta cita. Tenemos previsto solicitar los permisos al ayuntamiento para utilizar el pabellón de deportes y el parque para las conferencias. Y para el alojamiento tenemos pensando hablar con los propietarios de casas en los Clarines para que se las cedan durante estos días, tanto a los asistentes del congreso como a los ponentes más prestigiosos que recalarán en Beas esos días y que hablaran de temas tan importantes como la geriatría aplicada, gestión de residencia de mayores, primeros auxilios, sondas y buenas prácticas, gestión de residuos biológicos, animación sociocultural en el ámbito de la senectud, envejecimiento activo y sexualidad y auto sexualidad activa y pasiva.
-¿Cuántas personas asistirán al congreso?
-Está previsto que asistan un máximo de 143 mujeres y hombres, son los centenarios con los que contamos en la provincia. Aunque espero que, de aquí a noviembre, se incorporen algunos más, aunque lo que de verdad que me gustaría es que no hubiera ninguna baja, porque a estas edades, hay mayores a los que la muerte llama a su puerta, un día sí, el otro también.
-¿Cuáles son las principales ponencias que se van realizar?
-Aunque el congreso tiene un marcado carácter transversal, si hay una sesión en la que estamos invirtiendo mucho de nuestro tiempo para que todo salga bien, esa es la sesión del viernes por la mañana, que es la que dedicaremos a la sexualidad y la auto sexualidad activa y pasiva. Está totalmente demostrado que todo este tipo de procesos estimulativos generan grandes cantidades de endorfinas. Unas sustancias químicas que interactúan con los receptores en el cerebro, reduciendo así la percepción del dolor y provocando una sensación positiva en el cuerpo, similar a la de la morfina. Es decir, si a la ecuación de una mujer o un hombre centenario quitamos el dolor, nos queda un hombre o una mujer de cincuenta años, con sus dolencias y su hipocondría, pero con suficiente motivación como para tirarse en paracaídas.
-¿Qué espera de este congreso?
-Yo espero de este congreso no solo que terminen los mismo que asistan, sino que el año que viene seamos algunos más y Beas se convierta otra vez en la ciudad con la media de edad más alta del mundo, algo que pondría a mi pueblo en el mapa.
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