C. Botello / Lepe. Bien está lo que bien acaba, y en esta ocasión el trabajo, el enorme trabajo, las ganas, el esfuerzo, el pundonor del San Roque se pudo traducir en un triunfo más que meritorio ante el AD Ceuta (1-0). Si además se produce jugando en inferioridad desde el minuto 40 del primer tiempo entonces se puede catalogar de heróico.
Sangre, sudor y lágrimas, aunque en este caso para celebrar una victoria de enorme calado. Y es que al San Roque, al que el fútbol abofeteó la pasada semana ante el Betis B al recibir un gol en el añadido del añadido, en esta ocasión ha podido ver como su trabajo tuvo el premio de los tres puntos, para gozo de una afición que bien merecía un alegrón.
Empieza a tener un sello el equipo de Juan Carlos Camacho, el de la entrega, la fe y las ganas de competir siempre y sin importar el rival ni la situación del partido. Se vio en Sevilla como levantó un 2-0 en contra -aunque tuvieron el infortunio de perder muy al final-, y se ha vuelto a ver este sábado con su encomiable esfuerzo, esta vez justamente recompensado.
Fue el Ceuta quien comenzó mandando sobre el terreno de juego. Suya fue la pelota, el control del partido, pero sin crear demasiadas ocasiones ante el portal de David Robador. Aunque el dominio fue ceutí, el San Roque estuvo cómodo en el campo, y se permitió el lujo de inquietar a su rival. Como lo hizo Fernandito con un lanzamiento desde fuera del área.
El único peligro del Ceuta en el primer tiempo fue un disparo de Benji, que se fue a un lado del portal sanroquista tras dar en el travesaño por la parte superior. Claro que la jugada que peores consecuencias pudo traer para el San Roque fue una internada de Leo Maloku, que cayó dentro del área. El colegiado entendió que se había tirado y le mostró la que era la segunda amarilla. Roja, minuto 40.
Que el San Roque iba a adaptarse bien a la nueva situación, la de jugar con un hombre menos, se vio incluso antes del descanso, en una jugada de Azael que culminó él mismo con un disparo franco, pero sin mucha puntería.
En la segunda parte el AD Ceuta dominó más, lógico, pero curiosamente sin poder controlar tanto el juego. El San Roque, con uno menos, nunca pasó por apuros y sacó tajada de las acciones de balón parado. Avisó Becken en una falta, y poco después encontró premio con el gol de Lucas Correa tras rematar otra falta ésta botada por Azael.
Con lo que quedaba por jugarse, al AD Ceuta no le quedó otra que sacar todo su arsenal ofensivo en busca de, cuando menos, el empate… y al San Roque a pertrecharse lo mejor posible. Salió airoso el equipo de Juan Carlos Camacho en esa heróica defensa del botín obtenido. Además lo hizo con inteligencia, minimizando las ocasiones que dispuso el cuadro ceutí -muy pocas pese a su agobiante dominio-, que sólo rozó el gol a cuatro minutos del final en un disparo de Benji desde fuera del área, que David Robador en un paradón antológico se encargó de repeler.
No dio mucho más de sí el choque, ya que el San Roque siguió firme en defensa ante un Ceuta precipitado y que ya no dispuso de ninguna ocasión más para marcar.
SAN ROQUE: David Robador; Leo Maloku, Lucas Correa, Becken, Azael; Javi Mérida, Miguel Reina, David López (Miguelito, 83′); Carrascosa, Mauri (Toscanini, 53′), Fernandito (TJ, 69′).
AD CEUTA: David Ramírez; Benji, Víctor González, Guti, Jalid; David Castro, Sufián (Prieto, 71′); Ismael Maruja (Chico Díaz, desc.), Ismael César, Chakir (Francis, 61′), Cristo.
Árbitro: David del Río Lozano (colegio de Sevilla). Expulsó por doble amonestación a Leo Maloku, del San Roque (4′ y 40′). Mostró la cartulina amarilla a Fernandito, Lucas Correa, Miguel Reina, Javi Mérida y Becken, por el equipo de casa; y a Ismael Maruja y Francis, por los visitantes.
Gol: 1-0 (60′) Lucas Correa.
Incidencias: Partido correspondiente a la 2ª jornada en el grupo X de la Tercera División jugado en el Ciudad de Lepe. Más de un millar de aficionados estuvieron en la gradas. Se guardó un minuto de silencio en memoria de Xana, hija del que fuera seleccionador nacional de fútbol, Luis Enrique Martínez.