Redacción. Un total de 103 niños y niñas de la zona de influencia del Hospital de Riotinto, en el Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva, que abarca las comarcas onubenses de la Sierra, Cuenca Minera y parte del Andévalo, han sido atendidos en la consulta de alergias pediátricas del centro en su primer año de funcionamiento.
Este dispositivo asistencial, dependiente del servicio de Pediatría, permite a la población afectada acceder a este tipo de atención especializada sin necesidad de ser derivada a la capital u otras provincias, con las ventajas que ello supone en términos de accesibilidad y mejora en la calidad de la atención a la ciudadanía.
El Hospital de Riotinto ha sido uno de los primeros centros comarcales de Andalucía en incorporar esta prestación a su cartera de servicios, fruto de la apuesta de la Consejería de Salud y Familias por incrementar los recursos sanitarios a disposición de la población que reside en la zonas rurales y más alejadas de las capitales.
Esta nueva consulta de alergias para pacientes en edad pediátrica es ofertada por personal médico y de enfermería con capacitación en esta área, que ofrecen una atención integral a los usuarios que requieren de la misma: desde el diagnóstico al tratamiento de cualquier tipo de alergia, ciclo de vacunación y revisiones. El acceso a ella se produce a través de la derivación por parte del médico de familia o pediatra de atención primaria.
El impulso de esta medida forma parte del compromiso del Área de Gestión Sanitaria Norte de Huelva con el refuerzo constante y la mejora de los servicios para los alrededor de 70.000 ciudadanos que integran su población de referencia.
Prevalencia
Las enfermedades alérgicas presentan una alta prevalencia a nivel mundial, sufriendo algún proceso alérgico entre el 30-40% de la población. En España esta incidencia crece a un ritmo anual del 2%, estimándose que en la provincia de Huelva existen más de 200.000 personas alérgicas.
Se trata de una serie de patologías que tienen carácter hereditario, si bien dicho aumento está asociado a otros factores como los cambios ambientales y en el estilo de vida, principalmente en la alimentación. Pueden aparecer en cualquier momento de la vida, siendo muy importante el diagnóstico precoz para evitar su desarrollo progresivo y la afectación multiorgánica.
En la población infantil, suelen manifestarse inicialmente como lesiones eczematosas a nivel de flexuras de extremidades y piel seca, que se conoce con el nombre de dermatitis atópica. El proceso alérgico puede continuar y en muchos casos el niño comienza a presentar, además, crisis de tos o ahogos.
Los alérgenos principales son los pólenes, seguidos de los ácaros. Una actuación diagnóstica y terapéutica adecuada evita la progresión del proceso alérgico hacia las vías respiratorias inferiores y la aparición del asma alérgico. Las alergias a determinados alimentos, con una elevada incidencia en el colectivo infantil (se estima que afectan al 6-8% de los niños menores de 3 años), son también muy frecuentes en la actualidad.