Cristobal Guerrero. Este miércoles, día 13 de diciembre, es la festividad de dos santas que tienen connotaciones parejas en sus historias de leyenda y en sus iconografías de autores anónimos. Desde sus nacimientos a la muerte de ambas, la ceguera es causa del martirio y la consideración de elevarlas como santas a los altares.
La imagen de Santa Lucía porta en sus manos un plato en el que muestra unos ojos y en la de Santa Otilia los ojos los coloca el imaginero encima de un libro, en las dos bellas tallas el imaginero deja expuesto el motivo del sufrimiento que soportaron ambas vírgenes que consagraron sus vidas al Señor. Santa Lucía de Siracusa, (Sicilia) nació en el año 283 y murió a los veintisiete años, es venerada por la Iglesia Católica, por la Ortodoxa y por la Luterana, es la patrona de los ciegos, de las personas que padecen enfermedades de la vista, de los fieles que con fervor le rezan porque sufren pérdida de la visión, y para que les proteja siempre con este don tan preciado que Dios nos ha dado, así le rezan todos los profesionales a esta Santa cuyo nombre Lucía significa aporta la luz.
Santa Otilia, según la leyenda anónima escrita a principios del siglo X, nació en la región de Alsacia a finales del siglo VI, el padre era un duque alsaciano que al verificar la ceguera de esta niña no deseada, la repudió al punto de querer matarla. La leyenda nos cuenta que su madre la salvó de las iras del duque, entregándola a un convento para que la cuidaran y educaran. Recibió el bautismo y bendición de manos del obispo San Erardo a la edad de doce años y por una revelación divina tenida en un sueño fue bautizada con el nombre de Otilia que significa luz de Dios. Santa Otilia, es la patrona de los ópticos españoles y de todos los profesionales relacionados con la óptica asistencial, montadores, artesanos, diseñadores y ópticos optometristas preparados para ayudar y cuidar de la visión a las personas que lo necesitan.
Que las dos Santas nos protejan para vernos mejor. FELIZ NAVIDAD
