El director onubense Santiago Cayuela lleva al cine la historia de Enrique Llimona, un ejemplo de superación en el que mirarnos todos

La premier de ‘Más fuerte que el miedo’ fue un acto emocionante en el que el público tuvo la oportunidad de conocer personalmente, tanto a los creadores de esta producción audiovisual, como a algunos de los protagonistas de esta aventura real, dado que participaron muchas de las personas que ayudaron a Enrique a conseguir su reto. Un evento muy especial en el que el director Santiago Cayuela explicaba a los presentes que “nuestra única motivación a la hora de emprender esta producción era ayudar a cualquier persona que necesitara una inyección de fuerza. Tenemos la posibilidad de conseguir aquello que nos propongamos. La capacidad de superación del ser humano no tiene límites”.

Una oportunidad única para conocer a este director nacido en Huelva capital hace 31 años, residente en El Rompido, y cuya actividad está centrada en el mundo audiovisual. Una vocación a la que hace cuatro años decidía dedicarse profesionalmente, a pesar de haber estudiado Ciencias del Mar en la Universidad de Cádiz. Ambas pasiones le llevaron hasta el cine, puesto que, según nos cuenta, «siempre me gustó el mar y, a raíz de bucear y grabar imágenes bajo el agua, comencé a trabajar con mi hermano, que es fotógrafo profesional, con el que he viajado mucho, haciendo grabaciones de todo tipo. Y, a partir de ahí, he ido aprendiendo mucho, hasta que me di cuenta que esto era realmente lo que quería hacer, que era mi gran pasión». 

Y no se equivocó. Porque a lo largo de estos cuatro años en los que se ha dedicado profesionalmente al sector audiovisual ha realizado todo tipo de trabajos, desde spots de televisión, videoclips de artistas de la talla de India Martínez, Vanesa Martín o Chambao y producciones para celebraciones, como bodas, siempre con un toque diferente, ya que sus rodajes se llevan a cabo por todo el mundo. 

Con esta base, al conocer el reto al que pretendía enfrentarse Enrique Llimona, Santiago tuvo claro que quería participar de esa propuesta para difundir esta bonita historia llena de matices. «Tras reunirme con Enrique y conocer el proyecto que estaba llevando a cabo, tuve claro que merecía la pena, así que me impliqué de forma personal en la iniciativa. Y, para ello, decidimos utilizar la herramienta audiovisual con una finalidad solidaria. Queríamos ser un vehículo para transmitir estos valores», nos cuenta Cayuela, que considera que, al igual que el deporte, la creación audiovisual es una locura maravillosa, una herramienta única con la que se consigue alcanzar al espectador y llegarle de verdad.

Para Cayuela, «hacer esta película ha sido una experiencia maravillosa. Es cierto que hemos tenido mucho trabajo de preproducción, porque calculábamos que tendríamos que estar grabando durante 42 horas seguidas sin parar, que luego se convirtieron en más de 60. Era algo muy complicado, al contar con un equipo de tan sólo cuatro personas, que tendrían que ir corriendo, en coche, en barco o en bicicleta, teniendo en cuenta las características del reto. Siendo así, si era un reto brutal para Enrique, también lo era para nosotros». 

A partir de aquí, la productora ha estado un año y medio trabajando en el montaje de todo el material obtenido durante ese fin de semana. Una aventura que ha merecido la pena al tener la recompensa de haber realizado esta película, que puede tener un gran impacto en cada persona que la visione. Una cuestión que adquiere un mayor valor si tenemos en cuenta que el equipo ha participado en este trabajo por iniciativa propia, no por encargo de ninguna entidad. 

Ahora, Cayuela Videos trabaja en difundir esta llamativa propuesta. Especialmente, tras la premier, que, como hemos apuntado, fue muy emotiva para todo el equipo, «porque era la primera vez que veíamos un trabajo nuestro en la gran pantalla», tal y como afirma Santiago, que nos adelanta que «estamos trabajando la posibilidad de hacer una premier en Madrid, quizás antes de que finalice este año. Y, a partir de aquí, lo llevaremos por unos 25 festivales por todo el mundo, para después, en unos meses, traerlo a los cines de Huelva. Porque muchos onubenses nos están solicitando poder verla».

No en vano, «la noche del estreno en Huelva vivimos muchas emociones juntas. Porque hubo una expectación increíble y todo el mundo aplaudió al final, por lo que nos sentimos muy satisfechos. Al mismo tiempo, los espectadores reconocieron que salieron con el chip muy cambiado, porque el mensaje de superación que transmite la película lo podemos trasladar a nuestro día a día. Fue increíble». 

Un trabajo que estamos seguros de que seguirá dando que hablar y que, además, ha animado a este equipo a seguir en esta línea. Es más, ya están diseñando otra película documental, de la que, por ahora, tan sólo podemos adelantar que es probable que se difunda en una de las grandes plataformas online de mayor repercusión del momento. Estaremos pendientes, por tanto. 

Con todo ello, Santiago Cayuela, para terminar, nos deja un claro mensaje, porque piensa que «todos debemos hacer las cosas que queramos en la vida, aquello que nos propongamos. Hay que ser feliz en el día a día. Podemos conseguir todo aquello que queramos. Es lo que más se refleja en la película. Y no sólo por parte del protagonista. Sólo hay que ver mi ejemplo. Estudié Ciencias del Mar, pero he logrado mi sueño de dedicarme a lo que me gusta. Es una lección que encontramos al final del documental».

En definitiva, ‘Más fuerte que el miedo’ más que un largometraje es una actitud ante la vida, una historia natural, limpia y fresca, que ensancha el corazón y agudiza los sentidos. Un relato de esperanza en el que Santiago Cayuela ha querido cuidar hasta el más mínimo detalle para llegar al alma de los espectadores. Un abrazo en forma de película para todas aquellas personas que estén sufriendo situaciones difíciles de asimilar. Un canto del que podemos aprender mucho.