Redacción. El alcalde Gustavo Cuéllar abrió el acto dando la bienvenida a los asistentes y destacando el gran trabajo realizado por los escolares y profesores que ha hecho realidad este proyecto. Acompañado en el escenario por la concejala de Educación Paqui Griñolo, Cúellar entregó al director del centro Rafael Cruzado, una placa en reconocimiento por la gran labor educativa que realizan.
Un total de 38 escolares de 4º y 5º curso de Primaria han participado en este espectáculo musical, que consiguió despertar la ovación y la emoción del público que abarrotaba el patio de butacas. La brillante puesta en escena, el vestuario y la capacidad interpretativa de los niños y niñas del Zenobia, sorprendieron a compañeros de otros centros en la función matinal y al público general en la función que representaron por la tarde.
Dos funciones y dos éxitos rotundos en los que mucho tienen que ver Miguel López, Belli Fernández, Rocío Torralbo y María Domínguez, profesores del centro que han conseguido poner en pie, con pocos recursos, tirando de imaginación, de ilusión y compromiso, una obra de gran peso y profesionalidad, que estrenaron el pasado verano en su fiesta de fin de curso. Juntos han hecho las veces de directores, de productores y por qué no también de psicólogos, motivando y haciendo ver a sus niños y niñas que sí podían, que eran capaces.
Es importante destacar que los docentes han contado con la importante colaboración de padres y madres, y de varios alumnos que han ayudado en distintas labores.
En agradecimiento por su trabajo y entrega, por hacer valer su compromiso con la enseñanza y por llenar de valores el día a día de estos pequeños, recibieron de manos del alcalde un recuerdo conmemorativo del acto, al igual que lo recibieron los verdaderos protagonistas del musical, que han disfrutado de una experiencia inolvidable.
Mufasa, Simba, la dulce Nala, Rafiki, el malvado Scar o los simpáticos Timón y Pumba, junto a las enérgicas manadas de leones, cebras o jirafas, nos hicieron disfrutar de un espectáculo visual y sonoro digno de profesionales, al que han dado forma a base de trabajo y mucho más trabajo.
Y todo esto por una buena causa, por colaborar con la asociación Cometa Mágica, a quien ha ido destinado el dinero recaudado con la venta de las entradas. En agradecimiento por el trabajo y el esfuerzo desinteresado que han realizado, el presidente de la asociación David Sierra entregó al director del Zenobia un recuerdo del acto.
Con una sonora ovación a los pequeños actores y actrices que han hecho este gran sueño realidad, cerramos la puesta de largo de un musical que nos ha emocionado por el trabajo, el compromiso y la dedicación de sus protagonistas.