Redacción. El delegado territorial de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Pedro Pascual Hernández, ha cortado la cinta de la VIII Feria Gastronómica de El Andévalo, que se celebra en El Almendro entre el 9 y el 10 de abril, como una puerta abierta hacia los sabores y la belleza de toda la comarca y, con ello, al desarrollo social y económico de sus pueblos. El medio rural, ha aseverado, “tiene el potencial, los recursos, la tierra, el paisaje, los productos y el saber hacer y la gente para construir su presente y su futuro”. De ahí, según ha continuado, la oportunidad de este escaparate, para preservarlo y promocionarlo, para impulsar la economía local ya existente y estimular la puesta en marcha de nuevas ideas emprendedoras que generen riqueza y contribuyan así a la fijación de la población al territorio.
La naturaleza, la dehesa, la agricultura, la ganadería, el cerdo ibérico… encierran, desde la óptica de Pedro Pascual Hernández, un sinfín de posibilidades, como también el principal protagonista de la feria, la turma, la llamada trufa blanca, y las mil maneras de presentar en el plato este manjar. Esta oferta, como ha afirmado, se erige en un atractivo para la llegada de turistas y ofrece una alternativa “más que digna” para que los jóvenes no se tengan que marchar a la ciudad y para que aquellos que un día se fueron puedan volver. Un punto en el que ha recordado el valor añadido de un relevo generacional que aporta al campo savia nueva, frescura y que mejora con su formación y su vocación innovadora, el legado de la experiencia de sus antecesores.
El responsable de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural ha animado a creer en todo ello y ha puesto como ejemplo a la veintena de pequeñas empresas que exponen sus productos gastronómicos en la Plaza de la Constitución de El Almendro. “Constituyen una economía real, palpable y fundamental y al hacer negocio no sólo crecen ellas, sino que lo hace también nuestro medio rural”, ha remarcado. Todo ello, sobre la base de la sostenibilidad y la calidad de unos alimentos que van desde el jamón y demás derivados del cerdo ibérico, los quesos tradicionales, el aceite de oliva virgen extra, la miel o la repostería artesanal, acompañados en esta cita por la ineludible turma.
La VIII Feria Gastronómica de El Andévalo permite degustar todos esos ingredientes al ponerlos directamente en el paladar del visitante a través de un programa que contempla exhibiciones de cocina en vivo de chefs locales con la turma como estrella y que encuentra otro de sus atractivos en la salida al campo para la búsqueda de esta seta de gran valor culinario y tan ligada, como tal, a los encinares y el monte bajo de la comarca. No falta tampoco el encuentro con la vecina Portugal, representada por los productos típicos de la zona del Alentejo y la actuación del rancho folclórico luso de Santa Catarina. Talleres gastronómicos, buñueladas, manualidades, espectáculos musicales y de zancudos y piromalabares o un recorrido en vespa por las calles de El Almendro completan las actividades.