Adolfo Morales. El insuperable “cono” que identifica a este dibujante de cómics, es un sello que no pasa desapercibido al lector. Su magnifico porte y esa reivindicación permanente que de él hace gala, habla bien a las claras, de cuales son sus fidelidades y dónde se asienta su punto de partida. Ser tan original como Elpetardo no es ni muy común ni frecuente en nuestra ciudad.
Lleva años conectado a este mundo de “monigotes” como los describía su madre. Ellos hablan, respiran y opinan en muchas ocasiones, sintetizando lo que muchos pensamos, que unas veces callamos, pero que en numerosas ocasiones compartimos. Los dibujantes de cómics son en cierta manera como poetas de lo crítico, capaces de crear micro escenarios llenos de ocurrencias y sobre todo sentido común.
Nadie sabe a ciencia cierta, la conexión que lleva a este contable fresero de pasar del apunte a sus viñetas, pero existe y es en cierto modo, la puerta de atrás que necesariamente abre para conectar con el mundo exterior.
Curro es un hombre tranquilo, sencillo, aún ajeno a su carisma dentro del Cómic del que será sin duda figura. Su arte en expansión ya está asentado en la madurez que necesariamente le facultará para disfrutar de nuevas experiencias.
Lo mejor de todo, es cómo divierte a sus hijos y a su mujer. No siempre es fácil vivir con un artista. Hay excepciones.