Redacción. Los técnicos responsables del Proyecto Cajas de Biodiversidad –Cajas Nido- del Foro para la Defensa y Conservación de la Dehesa, Encinal, han acudido a la reunión técnica organizada esta semana por la Asociación para el Fomento del uso de la Biomasa en Andalucía ‘Unión de Actores de la Biomasa de Andalucía’ con el Ayuntamiento de Hinojos, para implantar este sistema natural de erradicación de plagas en el término municipal de esta localidad, situada en el entorno de Doñana, donde este método ya ha conseguido importantes resultados y está siendo vital para proteger la masa arbórea.
A lo largo del encuentro técnico, el experto del Foro Encinal y creador del método, Francisco Volante, explicó al alcalde de Hinojos, Miguel Ángel Curiel, el “potencial de creación de biodiversidad con el que están diseñados y fabricados estos modelos de ‘Nidos de Biodiversidad’, al tratarse de un sistema que alberga al mismo tiempo a distintas especies, (aves insectívoras, murciélagos, arañas, etc.), depredadores naturales de plagas tan dañinas como la de cerambícidos, que está diezmando las dehesas; o la procesionaria del pino, que afecta tanto a la importante masa forestal de pinares del municipio como a los usuarios, trabajadores o viandantes que por ellos transitan”.
En la reunión también hicieron aportaciones técnicas Fernando Santiso, coordinador de la Asociación de Biomasa de Andalucía, (U.A. Biomasa Andalucía), y Antonio González, técnico de Encinal, como entidad promotora de estos ensayos desde hace ya varios años y participante del ‘Proyecto Life Bio-Dehesa’, donde este modelo de caja nido, según vienen constatando los expertos, está mostrándose como una revelación a nivel mundial a la vista de los logros obtenidos en la lucha contra las plagas, una batalla que precisamente en el Parque Nacional de Doñana, en concreto en la zona del cámping, ha conseguido que la procesionaria del pino y los mosquitos hayan dejado de ser un problema.
Por su parte, el alcalde de Hinojos, como profesional y técnico del sector forestal y con gran preocupación por buscar soluciones a este problema, ha mostrado un especial interés en comprobar la eficacia de este modelo de lucha biológica y natural, de ahí que este encuentro haya supuesto un paso adelante para llevar a cabo experiencias demostrativas en el término de Hinojos que ayuden a reequilibrar de manera natural y definitiva estos valiosísimos ecosistemas.
Tanto Encinal como la ‘Unión de Actores de la Biomasa de Andalucía’ celebran “el interés y el esfuerzo del equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Hinojos en la lucha contra las plagas que amenazan el entorno natural de la localidad”, y destacan la importancia de que “el alcalde haya contado con la aportación de los técnicos especialistas para hallar soluciones reales, equilibradas y duraderas en el tiempo y corregir así el grave desfase poblacional de estas especies”.
El ‘Proyecto Cajas de Biodiversidad’ es una experiencia pionera que desde hace unos años viene desarrollando el Foro Encinal en una serie de fincas piloto, gracias a la participación de sus propietarios, con las llamadas cajas nido, un sistema totalmente natural y en el que sólo intervienen especies animales autóctonas que contribuyen a equilibrar la acción de los patógenos que afectan a las encinas y alcornoques.
Este método, que fue patentado por Francisco Volante, como técnico de Encinal, consiste en instalar una serie de cajas de biodiversidad en las que se crían ciertas especies de aves, murciélagos y arañas (depredadores naturales de las plagas), así como abejas que ayudan en la polinización. Desde que puso en marcha esta técnica, Volante fue observando cómo las encinas en las que ubicaba los nidos recuperaban el vigor perdido. Los pajarillos e insectos instalados en los nidos (beneficiosos para el equilibrio de la dehesa) se alimentan de otros insectos y gusanos que afectan al desarrollo y la supervivencia de las encinas. Desde su experiencia, este técnico ha observado que recuperar la biodiversidad perdida es un paso fundamental para conseguir unas encinas fuertes y como consecuencia, frenar el avance de la Seca del Encinar y de otras plagas, como las de procesionaria y mosquitos que se han tratado en el Cámping Doñana.