P. Gamero. Otra vez. Otra derrota del Recre. Y esta con el efecto colateral de dejar al equipo onubense en zona de descenso al término de la primera vuelta, a la que ha caído sin duda por méritos propios después de protagonizar una racha negativa que le ha llevado a sumar un único punto en los últimos ocho partidos.
En esta ocasión el Recre sucumbió en el Miniestadio ante el Barcelona B (3-1) en un partido que se desarrolló con guión similar al de otros del Recre, con un mismo principio y final. Una acción en la que a Dani Sotres se le puede y debe pedir más, y otra posterior en la que el colegiado Pizarro Gómez entendió como penalti una acción de Córcoles sobre Dongou fuera del área, marcaron el desenlace del choque resuelto en favor de un cuadro azulgrana que necesitó poco, muy poco, para ganar.
Y eso que el Recre, como ha ocurrido en otros partidos, cumplió al descanso, se sostuvo de pie sin excesivos agobios en ese primer tiempo ante un cuadro azulgrana que, eso sí, dista mucho de ese equipo rutilante que encadiló en pasadas temporadas.
Con el único cambio de Rubén Mesa por el ya ex albiazul Joselu, el Recre se presentó en el feudo azulgrana sabedor que una derrota le llevaría inexorablemente a los puestos de descenso. Como así fue. El castigo que se ha ido ganando a pulso en una racha negativa de marcadores, con seis derrotas consecutivas, y que rompió con la pedrea de un punto ante el Osasuna en la jornada anterior.
Y la puesta en escena del Recre fue la esperada, es decir aguantando atrás, presionando la salida de la pelota de los azulgranas, para que estos no se sintieron cómodos sobre el terreno de juego, dejando pocos espacios y estando siempre prestos a la contra en el momento de robar el balón. Aunque el Barcelona B quisiera tocar y tocar en busca de espacios, la presión de los albiazules no les dio margen y, en varias ocasiones, pudieron sorprender a los locales, pero los disparos de Cabrera primero, y de Dimas después, no encontraron puerta.
Conforme avanzó el primer tiempo el Barcelona B se adueñó por completo de la pelota, pero su superioridad en la posesión apenas se tradujo en ocasiones, ni siquiera en llegadas sobre el portal de Sotres, que de verdad sólo tuvo que intervenir en una acción final de Sandro, que remató desde cerca a la salida de un córner, y el meta cántabro sacó una mano providencial. El resto de las llegadas azulgranas fueron ds lanzamientos de falta, uno que salió a un lado del portal recreativista, y otro que dio en la barrera.
En realidad el Recre no estuvo tampoco nada incómodo atrás, resolviendo sin demasiados problemas las acometidas locales. Es cierto también que su presencia arriba, poco a poco, fue disminuyendo, y todo lo confió a un par de arrancadas de Cabrera y de Pedro Ríos, sin remate final. Lo peor fue que en una de esas salidas el uruguayo sintió un pinchazo en la parte de atrás de la pierna y tuvo que abandonar el terreno de juego, siendo reemplazado por Antonio Núñez.
Todo se vino abajo a los cuatro minutos del segundo tiempo. Un disparo lejano de Cámara, al que Dani Sotres pudo y debió responder con acierto, acabó en la portería del Recre tras tocar suavemente el meta cántabro, que reaccionó tarde al lanzamiento del jugador catalán. Este Recre, cogido con alfileres, tiene de por sí muchas dificultades para aguantar arriba ante cualquier rival. Lo de reaccionar es imposible.
A partir del 1-0, encefalograma plano de un equipo que quiere, por supuesto, pero que no puede. El transcurrir de los minutos fue el suplicio de siempre para unos jugadores que lo dan todo, pero a los que no le sale nada. Por si fuera poco, aparte de sus propias carencias, en toda la cara le da el viento en contra de algunas decisiones arbitrales, como la de Pizarro Gómez, que vio penalti en una acción de Córcoles en la que ya la falta era discutible, pero que indudablemente de haber algo era fuera del área. Sandro hizo el 2-0. Si el partido hubiera acabado ahí, nadie lo hubiera discutido.
Pero como el reglamento marca que hay que llegar a los noventa minutos, aún hubo tiempo para que cada equipo anotara un gol más, Cámara otra vez para los de casa y Pedro Ríos para los onubenses. No alteraron lógicamente el desenlace, resuelto desde mucho tiempo atrás, y que condenaba al Recre a otra derrota, ésta con el añadido de colocarlo en zona de descenso. Esto es lo que hay.
BARCELONA B: Ortolá; Patric (Juste, 90′), Costa, Edgar Ié, Grimaldo; Gumbau; Cámara, Munir, Joan Román (Adama Traoré, 75′); Sandro (Bicho, 87′) y Dongou.
RECREATIVO: Dani Sotres; Víctor Díaz, Juanan, Menosse, Córcoles; Dimas (Caye Quintana, 74′), Jesús Vázquez (Manu Molina, 84′); Pedro Ríos, Montoro, Cabrera (Antonio Núñez, 40′); y Rubén Mesa.
Árbitro: Valentín Pizarro Gómez (colegio madrileño). Mostró la cartulina amarilla a Edgar Ié (23′), Dongou (25′) y Sandro (39′), por el Barcelona B, y a Pedro Ríos (35′), Cabrera (35′) y Montoro (86′), por el Recreativo.
Goles: 1-0 (49′) Cámara dispara desde fuera del área y sorprende a Dani Sotres, que llega a rozar la pelota. 2-0 (59′) Sandro, al transformar un penalti que no fue, señalado sobre Córcoles. 3-0 (83′) Cámara resuelve sin problemas ante Dani Sotres tras un servicio de Munir. 3-1 (85′) Pedro Ríos remacha ante Ortolá, tras un centro de Montoro que prolongó de cabeza Rubén Mesa.
Incidencias: Partido correspondiente a la 21ª jornada en Segunda División, última de la primera vuelta, disputado en el Miniestadio.