Miguel Ángel Velasco. Media hora antes del acto de inauguración todo estaba preparado en su interior. La luz del local desbordaba la sombra nocturna dando a la calle un espejo inigualable. Sobre las lunas de la fachada emergían dos siglas bajo un nombre. MG, Moisés Giraldo. Rocío Castaño, propietaria de De Bellota, Gourmet, terminaba de preparar y revisar los últimos detalles del catering. Jamón de Huelva, de la marca Tartessos, vino de Huelva, combinados. Todo sabía a cosas de aquí. El personal perfectamente uniformado, esperaba paciente, al comienzo. Luz.
Luz sobre un interior de ensueño. Lámparas de arañas de cristal, mármol, cristales suaves, muebles clásicos adecuados, espejos , elementos de decoración de diseño, hacían confundir y casi anular los elementos propios del fin del local. Estética, Moisés Giraldo. Estilo. Peluquería. Todo resulta perfecto e innovador, casi mágico. Fuera de la costumbre y tópico de la peluquería tradicional. Es un lugar cómodo, agradable, relajante, con estilo propio y partícula donde la sesión de peluquería o y de maquillaje se convierte en una consecuencia razonable y lógica del mismo. Al igual que su resultado
A la hora señalada los invitados comenzaron a llenar el local. Toda la Huelva social acudía a su cita con su peluquero de cabecera, Moisés Giraldo. Decenas de bellas mujeres acicaladas e inmejorablemente ataviadas eran atendidas por el personal del Centro. Se trataba de la noche de ellas, su noche. Con la persona de su confianza, con ese que hace de sus cabellos la escultura deseada y soñada; esa persona que la examina y tras un breve estudio te conoce perfectamente, sabe de tus ángulos, de tu perfil, de la forma de tu cabeza. Y sobre todo conoce a la perfección las características de tu pelo. Y que tiene esa capacidad psicológica suficiente para saber de tu estado de ánimo y tus deseos. No todos los cortes son iguales, ni todos los rostros pueden llevar el mismo corte. Ni el mismo roete o moño o flequillo. Si e va o no el corte a capas. Si es de fiesta, de boda, de calle o de compromiso.
La llegada del maestro Giraldo, acompañado de Mario Gallardo, constituyó todo un acontecimiento. Las personas que lo esperaban en la calle se acercaron a él cuando lo vieron venir por la calle arriba y los que permanecían en el interior salieron para intentar ser de los `romeros en saludarlo, en tocarlo, en besarlo. Y en eso se convirtieron los siguientes eternos minutos. En un mar de abrazos, de saludos, de besos. Un reconocimiento al profesional, pero sobre todo una distinción a una gran persona. Moisés Giraldo.
La peluquería es todo un arte que va más allá de un simple peinado mantenido con laca. La peluquería es una ciencia o arte artesanal de la imaginación y del ingenio. Arte, manos, genio o espíritu creativo que, en este caso, pertenece a una persona con nombre propio. Moisés Giraldo.