Redacción. Miles de jóvenes llegados desde distintos puntos del territorio nacional han respaldado con su presencia esta prestigiosa feria temática, organizada por la concejalía de Juventud y la asociación Universo Otaku por la que han pasado desde su inauguración el pasado viernes más de 4.000 personas que han destacado precisamente como la clave del éxito de este Salón de Moguer, la diversidad de propuestas que contiene.
Entre las actividades más seguidas han estado los concursos de espadas, cosplay, videojuego o karaoke, el uso de consolas de última generación y otras retro, además de los demandados talleres de kabuki, pixelart y tatuajes, entre casi medio centenar de propuestas que han vuelto a despertar este año el interés de los visitantes.
Entre las novedades planteadas para la edición de 2014 han destacado la ampliación horaria de la zona de acampada, que ha sido utilizada por casi un centenar de personas; el manejo de drones que ha dado gran vistosidad al Salón, y la posibilidad de probar en primicia un videojuego diseñado por un grupo de jóvenes españoles, que han utilizado la cita moguereña como escaparate para ensayar la aplicación.
Además de actividades lúdicas, la cita moguereña con el anime ha contado con un zoco de productos mangas en el que se ha podido adquirir desde ropa y videojuegos hasta libros y figuras para pintar llegadas directamente desde tiendas especializadas de Madrid o Barcelona.
Tampoco ha faltado en este escaparate del continente asiático un espacio dedicado a la gastronomía japonesa, ofrecida con gran éxito por el restaurante Ramen, que cada año nos sorprende con una oferta culinaria más amplia y variada.
El XI Salón Manga de Moguer fue inaugurado el pasado viernes por el alcalde Gustavo Cuéllar, la responsable del área de Juventud Eva Rodríguez, y la presidenta de la asociación Universo Otaku Mª Carmen Márquez, junto al concejal de Deportes José Antonio Rodríguez.
En definitiva tres días de ocio y diversión, que se clausuraron en la tarde ayer, y que han cubierto las expectativas de los miles de visitantes que ya esperan regresar el año próximo a la ciudad del Nobel, para disfrutar de una experiencia única que contribuye a promocionar turísticamente la localidad y a apoyar al sector hostelero.