Redacción. La Delegación Territorial de Salud y Bienestar Social ha acogido una jornada de trabajo sobre el programa ‘Forma Joven’, una estrategia de la Junta de Andalucía cuya finalidad primordial es trasladar a los espacios que frecuentan los adolescentes asesorías de formación e información donde se atiendan las demandas que éstos planteen y se les ayude a afrontar los problemas de salud más frecuentes en esta etapa de sus vidas.
La actividad, inaugurada por la delegada territorial del ramo en Huelva, Lourdes Martín, ha estado dirigida específicamente a los profesionales de los dispositivos de atención primaria de Huelva (distritos sanitarios Huelva-Costa y Condado-Campiña y Área de Gestión Sanitaria Norte) que llevan a cabo ‘Forma Joven’ en los centros de enseñanza de sus respectivas zonas de influencia, con el objetivo de mejorar su preparación técnica y dotarles de nuevas herramientas que incrementen la capacidad de intervención del programa, coincidiendo con la puesta en marcha de una nueva edición del mismo a raíz del reciente inicio del curso educativo 2013-14.
En este sentido, ‘Forma Joven’, cuya aplicación es posible gracias a la colaboración entre las consejerías de Igualdad, Salud y Políticas Sociales y de Educación, Cultura y Deporte, persigue que los menores sean capaces de desarrollar habilidades para responder con conductas saludables a situaciones de riesgo o interrogantes que se les presenten, logrando así que ocio y salud sean compatibles.
Para ello, los jóvenes puedan acceder en los propios institutos u otros centros educativos a asesorías que les informan sobre relaciones sexuales seguras y prevención de enfermedades de transmisión sexual y de embarazos no deseados, así como acerca de los riesgos y consecuencias del consumo de tabaco, alcohol y otras adicciones y su influencia en la conducción de vehículos. Este modelo de trabajo también fomenta en los adolescentes las relaciones de igualdad de género al favorecer la convivencia y propiciar un punto de negociación de conflictos, a la vez que aborda la detección y asistencia de trastornos alimenticios, promoviendo los beneficios de una alimentación sana y equilibrada.
Las asesorías tienen un horario establecido y son atendidas por un equipo formado por un profesional sanitario y un orientador educativo. Así, en las localidades donde existen estas asesorías, los sanitarios organizan sus agendas de trabajo en función de esta actividad. Entre los profesionales que atienden las asesorías hay enfermeras, trabajadores sociales y médicos con formación para resolver las demandas específicas que trabajan de manera coordinada con personal docente, orientadores escolares, técnicos de corporaciones locales y un grupo de mediadores constituido por jóvenes de los propios centros.
Entre los contenidos abordados en la jornada destacan el trabajo en equipo y la mejora continua; información básica para saber actuar ante el conjunto de la población diana y los grupos específicos de riesgo; desarrollo de actividades de carácter comunitario adaptadas a las necesidades del colectivo; realización de actividades educativas, de detección de riesgos y de promoción de la calidad de vida y el mantenimiento de la salud; refuerzo de la atención sanitaria y evaluación de los resultados; análisis de la práctica profesional, así como coordinación, labor pro activa y búsqueda de las metas comunes.