José Manuel Alfaro/ Sección de ficción Cuaderno de Muleman. Inexorablemente el cambio climático está golpeando de lleno nuestra forma de vivir en la provincia. Adaptarse o morir esa es la cuestión, ante la situación de emergencia climática que estamos viviendo actualmente y que está poniendo a prueba a una sociedad que se despierta cada día con acontecimiento que corroboran la gravedad de una situación que ha tenido este domingo su epicentro en Santa Bárbara de Casas, que vive estos días asolada por una plaga buena de gurumelos que ha invadido los campos de este pueblo del andévalo y que está viviendo situaciones inverosímiles nunca vistas hasta la fecha.
Una situación que los expertos en gurumelos han catalogado como excepcional, lo que ha provocado que un equipo de investigadores de ingeniería forestal se hayan desplazado hasta la zona para estudiar la plaga buena de gurumelos que asola el municipio y el resto de las zonas colindantes que están provocando una sería de avistamientos y fenómenos extraños nunca vistos hasta la fecha, como el producido en la el casco urbano de la localidad andevaleña donde en los últimos días se han documentado el nacimiento de estas preciadas setas en lugares nunca vistos.
La comunidad científica de la provincia tiene numerosos estudios sobre la Amanita ponderosa o gurumelo, en los que se puede leer perfectamente la época de explosión, como es la primavera, las condiciones climáticas de inviernos lluviosos que producen estos picos, las zonas en las que aparecen, como son los jarales, montes de encinas y alcornoques, también entre pinares donde se pueden encontrar semienterrados en suelos pizarrosos y secos, siempre emitiendo un olor húmedo que ayuda a diferenciarla de hongos parecidos en aspecto.
Una seta de volva (base) grande y abultada, con un pie grueso y compacto en su etapa más joven, ahuecándose a medida que va madurando y que superan fácilmente los 10 cm de diámetro y del que nunca, hasta la fecha, se habían encontrado ejemplares debajo de la cama de un conocido vecino de Santa Bárbara que ha podido recolectar un impresionante ejemplar que ha sido llevado al laboratorio para su estudio, un hecho que podría obligar a las autoridades pertinentes a la declaración de emergencia en la zona.
Mientras se aclara el origen de este evento, un equipo de expertos recolectores en gurumelos se ha desplazado hasta la vivienda de este santabarbero para realizar una inspección de toda la vivienda y comprobar que esta plaga no se ha extendido por toda la casa y las colindantes y evitar así que la alarma social se instale en la localidad, ante una situación nunca vista que podría poner a Santa Barbar de Casas en el epicentro de todos los estudios internacionales que se han hecho hasta la fecha sobre este codiciado y apreciado manjar gastronómico.
Así que mientras que hordas de recolectores de gurumelos se han desplazado a la zona para controlar esta plaga buena, que llenará frigoríficos, ollas, sartenes y platos. Santa Bárbara de Casas lucha estos días a contrarreloj para controlar esta explosión de amanitas ponderosas mientras los científicos siguen en la casa de este conocido recolector de setas investigando si el gurumelo encontrado debajo de la cama es un gurumelo o una pelusa gigante.