Redacción. Desde Espacio 0 traen la exposición «Una Oración Cantada» de Susana Pérez Barrera. Una exposición donde la artista onubense explora su lenguaje personal y único, con una obra que rebosa vitalidad y fuerza.
Desde la espontaneidad de lo interno, como un grito ahogado surge una voz espiritual, una oración cantada que devuelve a la vida. Esta oración de la que emerge esta exposición supone una celebración y un canto a la vida misma entonado por Susana Pérez, expresándose en un cambio en su paleta, que se va tornando rosácea y violeta.
Este cambio no sólo se evidencia a través de la gama cromática, sino también en la técnica utilizada, el collage o papier collé. Aunque no es la primera vez que encontramos el uso de esta técnica en la obra de la artista, por primera vez toma un papel protagonista. Éste se convierte en trazo sin reclamar un espacio propio dentro del lienzo, integrándose armoniosamente en el conjunto del que forma parte y reflejando cómo la realidad de la vida se interna en lo pictórico, aún huyendo de la figuración.
Esta reflexión de la realidad tan profunda que puede albergarse tras la obra puede resumirse en unas palabras en las que Mark Rothko reza «Mi arte es abstracto, vive y respira».
Este es sin duda el sentimiento que nos evoca su obra, una obra profundamente intimista que se declara como una celebración a la vida. En ella se albergan desde los momentos más oscuros y dolorosos, evidentes en su paleta más fría y sombría, hasta la celebración del amor y el gozo en su gama más cálida de rosas y violetas. Este sentimiento vital se transmite de forma enérgica a través de la fluidez de sus formas y composiciones, recogiendo la alegría de la vida y el momento presente.