HBN. La exposición In Memoriam Francisco Talavera se encuentra disponible la sala de exposiciones de la Casa de la Cultura Juan Romero de la Rosa.
La muestra permanecerá abierta hasta el 28 de febrero, de lunes a viernes, en horario de tarde, de 18:00h a 20:30h; el Día de Andalucía también abrirá en horario de mañana, de 12:00h a 14:00h.
El artista hinojero se despidió de los suyos el pasado 15 de julio, tras sufrir una fulminante enfermedad y, aunque siempre vivió en su pueblo natal, muchos vecinos y vecinas se despidieron de él sin conocer su verdadera obra.
Francisco Talavera creó durante más de 50 años, pero no le gustaba presumir de su potencial artístico, pocas veces expuso su trabajo, prefería guardarlo en su intimidad o compartirlo con las personas más cercanas. Tras su muerte, la familia ha querido enseñar parte de su rico legado y reconocer su amplia trayectoria.
In Memoriam Francisco Talavera recoge un total de 62 piezas, entre las que se diferencian pinturas, esculturas y cerámicas. Las pinturas, en distintos tamaños y formatos, están resueltas con óleo y con pigmentos en pastel. Las esculturas están talladas en madera, barro, hormigón o bronce. Entre las 62 piezas encontraremos 5 fotografías, correspondientes a las esculturas que Francisco Talavera dejó instaladas en el casco urbano del municipio y que hoy día forman parte de los monumentos más representativos de nuestro callejero.
Entre todas las obras, se destacan algunos de los dibujos que Francisco Talavera trazó en París, cuando se formaba como pintor, pero posiblemente, la pieza con mayor valor sentimental sea la pintura que aún permanece en el estudio de Paco, un cuadro inacabado que puso fin a su carrera profesional.
Como se podrá demostrar en esta exposición, la obra de Francisco es muy versátil, aunque el artista hinojero fue licenciado en Bellas Artes en la especialidad de pintura, por la Universidad de Sevilla, también amaba la escultura. Su amigo y compañero Antonio Gracia afirma que “Paco se sentía más escultor que pintor”, pero independientemente de las disciplinas mencionadas, el artista tenía un sello artístico muy personal, incluso peculiar, como su propia personalidad, la que le daba la libertad de crear sin ningún tipo de prejuicio. Tanto es así que nunca llegó a dar nombre a ninguna de sus obras, siempre las dejó abierta a la interpretación del espectador, para que se sintiera tan libre como él lo hizo en cada momento de creación.
Este modo de entender la vida también lo aplicó en la enseñanza pública, donde ejerció su profesión. Los alumnos y alumnas de Paco tuvieron la oportunidad de aprender sin normas estrictas, Paco fomentaba la creación por inspiración, e intentaba trasmitir su enseñanza con la sensibilidad y el respeto que siempre se ganó.
Fransisco Talavera inició su carrera en San José de la Rinconada, pasó por Gilena, Almonte, Bonares, Bollullos de Condado, La Rábida, también impartió clases en la prestigiosa Escuela de Artes de Huelva, León Ortega, o en el Pabellón de Chile de Sevilla; el artista se jubiló en Sanlúcar de Barremeda.
Hasta sus últimos días Paco recordó las experiencias vividas en las aulas, porque tuvo la suerte de trabajar en lo que más le apasionaba.
In Memoriam Francisco Talavera es una exposición-homenaje a la trayectoria de Francisco Talavera Lozano, para muchos amigos, compañeros de profesión y alumnos, solo era necesario el nombre de Paco.