Redacción. Tras el paréntesis estival, el Archivo Histórico de Moguer ha retomado esta mañana el ritmo habitual de su programa El Documento del Mes, con el que se pretende dar a conocer elementos especialmente interesantes y valiosos de los que integran el gran fondo documental que se custodia en la institución que dirige Diego Ropero.
La rica historia de Moguer y su decisiva y dilatada relación con el descubrimiento y la conquista del Nuevo Mundo, son sin duda uno de los patrimonios más importantes de la ciudad del Tinto, por lo que la presentación del documento de septiembre ha incluido no sólo la explicación detallada del documento del codicilo por parte del archivero municipal, sino también una biografía de su autor, Martín Yáñez de Estrada, hijo del gran piloto moguereño Bartolomé Ruiz de Estrada que fue uno de los ‘trece de la fama’ que iniciaron con Pizarro la conquista del Perú.
Martín Yánez de Estrada acompañó a su padre en el descubrimiento y colonización del incario, destacando más tarde como conquistador y poblador de la provincia de Santa Marta. Fallecido su progenitor, Martín Yáñez regresó a Moguer donde pasó una larga enfermedad (dicen que estuvo en cama 13 años) en su casa de la entonces calle de las Alpujarras, la actual calle Obispo Infantes. Recuperado de sus dolencias viajó de nuevo a las Indias para ocuparse de los asuntos de la familia, y ya en los últimos años de su vida regresó de nuevo a su ciudad natal, donde sirvió a las órdenes del Marqués de Villanueva del Fresno como encargado de cobrar sus rentas, hasta que falleció en 1577.
El documento que se ha presentado esta mañana es un codicilo del testamento de Martín Yáñez de Estrada, fechado pocos días antes de su muerte, que nos acerca a ese esplendoroso momento histórico en el que Moguer ocupaba un destacado lugar en el flujo de mercancías, bienes y personas entre el viejo y el nuevo mundo, ‘una época gloriosa del pasado de nuestra ciudad que tenemos la obligación de preservar y difundir, como lo hacemos hoy dando a conocer este interesante documento de uno de esos intrépidos navegantes que nos hacen sentirnos orgullosos de nuestros antepasados’, según ha afirmado la concejala de cultura, Lourdes Garrido