Jaime de Vicente. Su nombre y su actuación pública son bien conocidos. Javier Barrero, socialista, secretario general del partido en Huelva durante doce años, diputado en el Congreso por esta provincia desde la II a la X legislatura y vicepresidente 2º del Congreso, desde donde pasó a presidir la Autoridad Portuaria de Huelva.
Ocupando este puesto le conocí con motivo de su propuesta de traer a Huelva un proyecto de altura. En él José Luis Gómez, gran personaje de la cultura onubense, acompañado de primeras figuras de la escena española, demostraba la plena vigencia de nuestros clásicos en el siglo XXI. Invitó a participar en el proyecto a la Fundación Caja Rural del Sur, representada en aquella ocasión por su presidente José Luis García Palacios –otro amigo que nos falta- y su director Guillermo Téllez.
En aquella ocasión pude constatar personalmente su calidad humana, su talante conciliador y dialogante y su profundo interés por la cultura. Quizá también, en la simpatía que me inspiró pudo influir alguna coincidencia personal, como que su nombre de pila completo sea Jaime Javier o que fuera, como yo, un castellano nativo trasplantado y bien enraizado en el territorio de Huelva.
A este primer contacto siguieron otros que fueron creando una corriente de simpatía mutua y en mí, de admiración por él. La consecuencia natural fue nuestra invitación a integrarse en una joven Asociación Cultural Iberoamericana. Esta Asociación recogía el testigo del Otoño Cultural Iberoamericano –OCIb- de manos de la propia Fundación Caja Rural y que reunía a un grupo de personas que están contribuyendo significativamente a que el papel de Huelva en el panorama de la cultura iberoamericana sea cada vez más destacado.
Coincidió esta entrada de Javier Barrero en la Asociación con una situación preocupante de su salud que le llevó a luchar contra un cáncer cuando el mundo fijaba su atención en la pandemia que lo asolaba. Superada esa circunstancia, se unió decididamente a los trabajos de organización de la próxima edición OCIb 2022. Su labor se estaba centrando en lograr el panel de ponentes idóneo para el II Encuentro de Pensamiento Iberoamericano (EPIb), programado desde la Universidad de Huelva, la Internacional de Andalucía y nuestra Asociación, que precisamente se va a estructurar alrededor del tema “Democracia”, un concepto al que él siempre sirvió.
En la línea de grata colaboración que manteníamos, estos días los dedicamos a presentar a las instituciones un Avance de la Programación del OCIb 2022. Precisamente, el pasado 6 de mayo figuraba en su agenda y la nuestra la visita con este objeto a Pilar Miranda, presidenta del Puerto de Huelva, un encuentro especial en la sede cuya presidencia ocuparon ambos. Pero tres días antes, la diosa de la muerte Átropos segaba bruscamente el hilo de su vida, dejándonos a quienes le queríamos en ese estado, mezcla de estupor y tristeza, inducido por la desaparición de alguien que tenía tanto que aportar a la sociedad civil después de toda una vida de servicio en el sector público. A despecho de la crueldad ciega de la parca, Javier permanecerá en ese rincón de la memoria que muchos reservamos a los amigos más preciados.
