Redacción. Con la plaza de la Barriada del Rocío de Isla Cristina a rebosar de vecinos, en la noche de este lunes 12 de agosto fue presentada María Santísima Reina de los Gitanos en un acto lleno de emotividad y que estuvo presidido por el primer teniente de Alcalde, Francisco Zamudio, a quien le acompañó la teniente de alcalde y concejala de Festejos, Isabel López y la Concejala de Educación, María del Carmen Beltrán.
El presidente de la Asociación Cultural y Religiosa “Reina Gitana”, Sebastián de la Palma, fue el conductor del acto que comenzó con la toma de posesión de la Junta Directiva de la asociación y la imposición de medallas. Palma, que dio la bienvenida a las autoridades, al escultor de la talla y asistentes, seguidamente dijo que “hoy es un día muy especial, llevamos más de un año trabajando para tener la imagen de nuestra Virgen con nosotros y aunque no ha sido fácil, gracias a vuestro apoyo y especialmente al de la concejala de Festejos, Isabel López, que más que política, ha estado como persona ayudándonos en todo, lo que quiero expresarlo públicamente, Isabel, muchas gracias por todo”.
Seguidamente tomó la palabra el artista ayamontino José María Martín Fernández, autor de la imagen, quien agradeció a la asociación “por la confianza que habéis depositado en mí y aunque no es la primera vez que trabajo para Isla Cristina, esta es especial, os la he hecho con mucho cariño y ganas, esperando la acojáis con el mismo sentimiento que le he puesto yo en hacerla”.
Las encargadas de descubrir la imagen fueron María de los Ángeles Tabares e hija, principales donantes del coste final de la talla, quienes emocionadas y sin poder articular palabra alguna, desprendieron a la Virgen de una tela que la cubría y dejarla a la vista de todos, momento éste de gran emotividad que arrancó el aplauso de todos los vecinos.
A continuación subió al escenario la teniente de alcalde y concejala de Festejos, Isabel López, quien comenzó su alocución apuntando que “con la presentación de la Virgen, se ha subido un peldaño más en la consolidación del sueño de una barriada”. López puso en valor “la juventud de esta Junta Directiva que no está reñida con su ímpetu y ganas de trabajar por la barriada que ha seguido todos los pasos para constituirse legalmente y el ayuntamiento tiene que estar a su lado, cuando están empezando que es cuando más cuesta”.
López puso de relieve que “la asociación vaya de la mano de la Iglesia, máxime cuando ya hay una imagen de una Virgen, por eso ellos se han confirmado y van a continuar formándose en la fe cristiana para que, en Abril, si todo sigue su curso, la imagen será bendecida de cara al Encuentro Romero de 2014”. López concluyó deseándoles a todos los componentes de la Asociación Reina Gitana, “mucho ánimo para que lo que hoy empieza, con el tiempo, se vaya haciendo más grande y enhorabuena a todos”.
Por último, cerró el acto el primer teniente de Alcalde, Francisco Zamudio, quien comenzó felicitando a toda la barriada “en la que me siento como en casa porque yo nací en la calle Barrio Nuevo, muy cerca de esta plaza” para a continuación felicitar a la Junta Directiva de la asociación “por el arduo trabajo realizado hasta llegar aquí y mis felicitaciones al escultor por la magnífica talla que representa a la perfección a la mujer gitana”. Para la familia Cruz-Tabares, principales benefactores en la realización de la talla, también tuvo palabras de gratitud “por su generosidad que ha posibilitado que hoy podamos disfrutar de esta preciosa figura”.
Tras hacer Zamudio un breve repaso de sus vivencias en el barrio, dijo no estar allí como Paco Zamudio, el vecino, sino “como político, porque el Ayuntamiento de Isla Cristina tiene la obligación de estar aquí y es un honor ser yo quien lo represente”. El responsable del Área de la Vicepresidencia dijo que “un pueblo tiene el derecho a manifestarse como lo crean conveniente y si lo han creído con una Virgen que les represente, como la de los payos, me parece magnífico, podéis contar conmigo y con el Ayuntamiento, felicidades a todos”.
El acto concluyó con la interpretación a flauta y tamboril de la Salve y unos modestos fuegos artificiales que sirvieron como preludio para la música que sonó en la plaza durante algunas horas más.