S. D. El regatista del CN Río Piedras, Guillermo Flores, es uno de los componentes del equipo español en el Campeonato del Mundo de ILCA 7, evento que se celebra en Barcelona desde este viernes y hasta el próximo miércoles, 10 de noviembre y que será la primera gran cita de la clase después de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
Por tal motivo la lista de inscritos muestra un altísimo nivel, con el croata Tonci Stipanovic y el noruego Hermann Tomasgaard, medallistas de plata y bronce respectivamente en Tokio 2020, como principales favoritos.
España contará con una amplia representación, entre los que destaca el nombre de Joel Rodríguez, quien vuelve a la competición tras finalizar decimosexto en Tokio. Junto a Rodríguez, y como parte del equipo nacional, estará también Joaquín Blanco, Leo Barreto y Ricard Castellví, todos ellos entrenados por Jano Toro, técnico nacional que acompañó a Rodríguez en Tokio 2020. La escuadra nacional se completa con Mario Plomer, Pep Cazador, Món Cañellas, Francesc Martínez, Gonzalo Suárez, Max Urquizu, además del mencionado Guillermo Flores.
Flores, gracias al apoyo de su club el CN Río Piedras y la Federación Andaluza de Vela (FAV), con quien lleva un mes de preparación en el grupo de tecnificación, comparte entrenador con los representantes de Argentina y Ecuador con los que hace equipo. “Después de la operación de brazos a la que me sometí este verano, comencé con mi preparación y sé que estoy trabajando bien y que los resultados van a llegar, si no ahora, será el año que viene”, señaló.
En este evento el onubense reconoció que tiene ganas de disfrutar: “Tengo presión cero, quiero divertirme y tratar de corregir algunas cosas de las que tomé nota hace un mes en el campeonato de España”.
No parece que vaya a ser una regata fácil para nadie como apuntó Flores: “Se espera poco viento hasta el final, son fechas de mucho cambio, así que se esperan días complicados”. En cuanto al objetivo, el onubense dijo que “estaría bien entrar en el grupo oro y de hacerlo estaría muy contento porque en esta flota no es nada fácil”.
Pase lo que pase para Guillermo Flores es una oportunidad única de puesta a punto de cara a la temporada que se avecina, en la que tiene puestas muchas ilusiones.
La competición arranca este viernes en Barcelona con un programa deportivo que prevé la disputa de doce regatas, a razón de dos por día. Las tres primeras jornadas se destinarán a la clase clasificatoria y las tres últimas a la fase final, que terminará el miércoles 10, día en que se conocerá al nuevo campeón del mundo de la clase de vela olímpica ILCA 7.