Antonio Delgado Pinto. A principios del siglo XX, aún quedaban algunas décadas para que se instalasen en Huelva las primeras fábricas del Polo Industrial y consecuentemente comenzase la gran migración de los pueblos hasta la capital.
Huelva sigue este momento su evolución social y económica basada en el sector primario, es decir, la minería, la pesca y la agricultura. Es ahora cuando aparecen en la ciudad los grandes arquitectos que trabajaron en la primera mitad del siglo pasado en la capital; a uno de ellos, Pérez Carasa, corresponde la construcción de uno de los edificios que presentamos hoy aquí: el chalet Plus Ultra.
PUERTO DE LA LAJA. Embarcadero de mineral en el Guadiana
Situado en la margen izquierda del río Guadiana, este colosal edificio fue construido para embarcar el mineral proveniente de las minas de Herrerías, Santa Catalina y Cabezas del Pasto, que llegaba hasta aquí por un pequeño ferrocarril minero de apenas treinta kilómetros de longitud.
Como curiosidad hay que señalar que durante la primera época, el cable aéreo de la cañada de Sardón, de fabricación alemana, era el que se encargaba de cubrir los últimos cuatro kilómetros y medio para transportar hasta aquí el mineral.
En la actualidad, el embarcadero ha perdido todos sus elementos metálicos: vigas, tolvas, raíles, compuertas, … El antiguo trazado ferroviario, que estuvo en uso durante tres cuartos de siglo, hasta el año 1965, forma hoy día la Vía Verde del Guadiana.
CHALET PLUS ULTRA. Un edificio con historia en los campos de Gibraleón
Más conocido como Casa Damas, este chalet fue construido en 1933 por el arquitecto José María Pérez Carasa para el empresario del transporte Arturo Damas. En él se observan detalles de arquitectura náutica y racionalista que lo emparentan con la arquitectura del cine Rábida de Huelva, por ejemplo. Recientemente el Colegio Oficial de Arquitectos ha otorgado la Placa Docomomo a este edificio que, a pesar de su ruinoso estado, ya estaba incluido en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz.
Su diseño con algunas esquinas redondeadas y su torreta sobre el piso superior le dan apariencia desde la lejanía de barco varado en medio del páramo.
FÁBRICA DE HOLANDAS. Torre alambique en San Juan del Puerto
Los holandeses fueron los primeros en reducir el vino de volumen y peso para facilitar su transporte; holandas fue una palabra mucho más fácil de pronunciar para los españoles que brandewijn, vino quemado.
Esta torre alambique, levantada en la primera mitad del siglo XX, es todo lo que queda de esta destilería, en cuya fachada aún puede leerse ese nombre: fábrica de holandas. Sus más de treinta años de abandono han hecho que su interior haya perdido todo vestigio de lo que un día sirvió para calentar y evaporar el alcohol.
PUENTE DE LA TAVIRONA. Puente ferroviario sobre el río Piedras
Se levanta sobre el río Piedras y sobre él pasaba el tren que unía Huelva con Ayamonte hasta 1987. Tiene 80 metros de longitud y fue construido en Gijón por la empresa Duro Felguera en el año 1931.
El proyecto de este ferrocarril fue aprobado en 1913, aunque el tren no comenzó a funcionar hasta 1936. En esta línea existió un puente muy parecido para salvar el río Odiel a su paso por Gibraleón y que fue destruido en la riada de 1997, cuando la mayor parte del trazado había sido ya rehabilitado como vía verde.
CARABINEROS DE ISLA CANELA. Vigilancia en la desembocadura del Guadiana
Este cuartel de carabineros, bastante parecido al viejo cuartel de Malandar, que vimos aquí hace algunas semanas, está situado en la isla de Canela, justo donde el estero del mismo nombre desemboca en el río Guadiana. Por ello tenía la doble misión del control de la frontera hispano-lusa y de la vigilancia de las entradas por el Guadiana desde el mar.
Al igual que el resto de los cuarteles de carabineros de nuestra provincia, quedó abandonado a mediados del siglo pasado, algunos años después de que el cuerpo de carabineros quedase integrado en el de la Guardia Civil.