Antonio Delgado Pinto. Huelva es una gran desconocida para muchos, pero no solo para foráneos, también para los propios onubenses. De Sierra a Costa, pasando por Andévalo, Condado y Campiña, nuestra tierra tiene un sinfín de lugares bellos, a la par que desconocidos para la mayoría.
El onubense Antonio Delgado Pinto nos presenta cada sábado cinco lugares imperdibles de la provincia de Huelva. En esta ocasión, nos recoge monumentos e infraestructuras que datan de principios del siglo XX.
Apunta todos estos rincones que un buen choquero que se precie debe conocer.
CUARTEL VIEJO DE MATALASCAÑAS. El mayor cuartel de carabineros de la provincia
A pesar de que su silueta se vislumbra a más de un kilómetro de distancia, es fácil pasar de largo por la playa sin verlo: el primer cordón de dunas lo oculta y es necesario subir a alguna de ellas cada cierto trecho para situarlo y tomar referencias.
Conocido como Cuartel Viejo de Matalascañas, este edificio fue construido en los primeros años del siglo XX para quedar abandonado en 1950, cuando se levantó en sus inmediaciones uno más moderno pero mucho menos interesante, desde el punto de vista arquitectónico, más cercano a la línea de costa.
De planta cuadrada, es el único cuartel de carabineros que tiene un piso superior. La ruina de este magnífico edificio en medio del paisaje dunar es todo un espectáculo cuando al atardecer el sol dibuja los relieves de fachadas, puertas y ventanas.
CUARTEL EL INGLESILLO. Víctima de una duna móvil
La duna móvil que está devorando el edificio casi ha llegado al dintel de la puerta principal, donde aún puede leerse el maltrecho letrero cerámico que nos da la pista de que nos hallamos frente a uno de los cuarteles que jalonaron la costa de Doñana.
Se trata de El Inglesillo, un cuartel situado a unos centenares de metros de la línea de playa y que sirvió de enlace con los destacamentos vecinos de Zalabar y de Malandar.
La gran geodinámica dunar de la zona ha hecho que el pozo de donde se surtía este cuartel se haya convertido en una construcción muy interesante: al desplazarse la duna, el entubado del pozo ha quedado visible, semejando en la actualidad una torre cilíndrica de varios metros de altura.
CUARTEL DE ZALABAR. Un cuartel en el corazón de Doñana
No lejos de las ruinas de la torre almenara de Zalabar, se levanta este cuartel del mismo nombre, que empezó siendo de carabineros y que pasó luego a ser destacamento de la Guardia Civil, tal como reza el letrero de azulejos que aún subsiste sobre la puerta principal.
Es un edificio rectangular de grandes dimensiones construido en ladrillo macizo, al igual que todos los que se levantaron en ese tiempo. Fue edificado a principios del siglo XX y abandonado en el año 1973.
CUARTELES DE MALANDAR. Vigilancia en la desembocadura del Guadalquivir
Estos dos cuarteles, muy cercanos entre sí, están situados cerca de la desembocadura del Guadalquivir, siendo por ello los más meridionales de nuestra provincia. El más antiguo de los dos, con una planimetría similar al cuartel de Isla Canela, fue edificado a finales del siglo XIX y quedó abandonado en los años sesenta del pasado siglo, cuando se construyó el nuevo, de mayores dimensiones, a unos centenares de metros del primero.
Vigilaban la costa este de nuestro litoral y las entradas por el río Guadalquivir. En sus inmediaciones hay un almacén con los restos de pateras y lanchas neumáticas que se iban confiscando.
CUARTELES DE MATA DEL DIFUNTO. Oteando el océano desde el médano del Asperillo
No es fácil llegar hasta aquí, los caminos han desaparecido y solo un estrecho pasillo, no exento de riesgo, al borde de los acantilados del Asperillo conduce hasta ambos edificios, separados entre sí por unos doscientos metros. Hace poco tiempo, mi amigo Manolo Guerrero y yo vinimos a echar un vistazo y a hacer algunas fotografías.
A pesar de la ruina en que se encuentra en la actualidad, se percibe que el edificio más antiguo fue de grandes dimensiones y de estilo muy parecido al de El Inglesillo. Los restos de los frontones, de las cornisas o de las ménsulas nos muestran un gran número de detalles constructivos y cierto valor arquitectónico. Es el cuartel más occidental de todos los que se alineaban en las costas de Doñana.
El edificio más moderno, probablemente de la década de los años sesenta, es mucho más simple. Su ubicación, justo al borde del médano, es un lugar ideal para contemplar la inmensidad del Atlántico.
1 comentario en «La Huelva Desconocida. Cinco cuarteles de Carabineros en Doñana de principios del siglo XX»
Porqué se llama o conoce por «El Inglesillo»