Redacción. Manuel Vázquez López, Guillermo Sundheim, Eduardo Díaz y Franco de Llanos o Heinrich Doetsch. Estos fueron son algunos de los nombres que resonaron en la tarde de ayer en el Salón de Actos del Museo de la capital onubense. Gracias al trabajo de la rectora de la Universidad de Huelva y catedrática en Historia Contemporánea, María Antonia Peña, estos destacados empresarios abandonaron su faceta más reconocida para descubrirnos otra, la de mecenas y propulsores de la actividad artística en la Huelva de comienzos del siglo XX.
El recorrido abordado por la catedrática dio comienzo en 1878 con el nacimiento de la Escuela Libre de Bellas Artes, institución educativa y de enseñanza artística constituida por suscripción popular y apoyada por miembros de la alta sociedad, como Manuel Vázquez López, entre otros.
La ELBA de Huelva fue predecesora de la Escuela de Artes y Oficios y de las posteriores Escuelas de Pintura de la capital. Nace en el contexto crucial en el que el arte se convierte en un elemento estrechamente unido a la vida de las élites. Estas veían en él un ambicioso negocio.
La enseñanza dio paso a la adquisición y formación de extraordinarias colecciones patrimoniales en ciertos sectores de la burguesía residente en la capital. Peña quiso detenerse ante el caso más destacado de coleccionismo, el del alemán Heinrich Doetsch. Este amante del arte, vinculado a Huelva por motivos comerciales y empresariales, configuró a partir de 1874 una colección abrumadora. Estaba constituida por más de 400 obras del siglo XIV, XV y XVI. Estaría emplazada hasta su muerte en la residencia que Doetsch habitaba en una de los barrios mas insignes y distinguidos de Londres.
El mecenazgo ocupó el último tramo de la conferencia de la rectora de la onubense, protagonizado por la figura del germano Guillermo Sundheim. El propietario de la Rio Tinto Company Limited, promotor del desarrollo económico y comercial de la provincia de Huelva, conformó de manera privada y particular su propio Museo de piezas arqueológicas extraídas de las diversas excavaciones en tierras onubenses y extremeñas. Además de esto, Sundheim se convirtió en mecenas de artistas locales como Antonio J. Picazo o Antonio Matarredona, creadores que dejaron su impronta de diversos edificios singulares de la capital.
En el desarrollo de la conferencia, María Antonia Peña dio a conocer una visión diferente de la sociedad onubense. Reafirmó el carácter célebre y cosmopolita de Huelva en el último tercio del siglo XIX. La ponente estuvo acompañada por la directora del Museo, Elena Aguilera, y el comisario de la Exposición 100 Años de Bellas Artes en el Museo de Huelva, Jesús Ricca.
PRÓXIMAS CONFERENCIAS EN EL CENTENARIO
Esta actividad se enmarca dentro de la programación que el Museo de Huelva ha diseñado para conmemorar el Centenario de la inauguración del Museo de Bellas Artes de la capital. El Ciclo de Charlas se completará los próximos días 30 de septiembre, de la mano del el Doctor en Bellas Artes y artista plástico, Rodrigo Vargas Nogales y el 7 de octubre, de la mano del Doctor en Historia del Arte, Jesús Velasco Nevado.